Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Además de su cultura y tradiciones, la población yucateca también se caracteriza por sus rasgos físicos, entre ellos sus ojos, que además de ser rasgados tienen la singularidad de ser chicos, no por fuera, sino por dentro, por lo que son hipermétropes.

El presidente del Colegio de Oftalmólogos de Yucatán, Luis Ávila López, explicó que el paciente hipermétrope ve un poco borroso de lejos y no ve bien de cerca, mientras más acerca algo, menos claro lo percibe.

Precisó que esta situación no es algo que se desarrolle con la edad, se debe al tamaño del globo ocular, por lo que a algunas personas se le normalizará la visión con el paso de los años, pero a otras no.

No obstante, existe gente que el hipermétrope se le acentúa con el paso del tiempo, ya que el cristalino tiene ciertos cambios; por ejemplo, a algunas personas les sale catarata y le cambia la graduación del ojo. El lente que está dentro del globo ocular, llamado cristalino, cuando se opaca cambia la velocidad de la luz que lo atraviesa, lo que genera que el punto de enfoque se vaya un poco hacia atrás.

Las características de los yucatecos son muchas y entre las comunes se encuentran los ojos chicos, lo que se conoce como hipermetropía (defecto ocular de refracción).

Es común ver esto en niños de cuatro a seis años; cuando el menor crece, el ojo también, y de cierta manera se va normalizando; pero cuando el paciente queda hipermétrope y llega a los 40 años, entonces se enfatiza el problema de presbicia, vista cansada, apuntó.

Cabe mencionar que a diferencia de esta zona, en el centro y norte del país las personas tienden a ser miopes; se trata de gente que tiene los ojos por dentro más grande de lo normal, por tanto, de lejos ven borroso y de cerca bien.

El cirujano oftalmólogo indicó que otra característica de los habitantes del sureste es que al tener ojos rasgados, éstos tienden a ser un poco ovalado, lo que refleja astigmatismo, por lo que pueden padecer una combinación de hipermetropía con astigmatismo.

Explicó que la gente que sufre de algún efecto refractivo, y en especial astigmatismo, tiende a cerrar los ojos, “aquí se observa mucho que las personas cierran los ojos para tratar de enfocar”.

Estas singularidades también pueden ser factor de riesgo para la aparición del glaucoma de ángulo estrecho o de ángulo cerrado en pacientes que tienen los ojos muy chicos, porque tienen estrechos los espacios, también es una patología que se observa en la consulta de nosocomios como el Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (Hraepy).

El glaucoma estrecho conlleva que estas personas tengan la presión del ojo alta de manera crónica, por lo que en ocasiones pueden tener episodios agudos, lo que causa daño al nervio óptico, el cual conecta al ojo con el cerebro, y cuando presenta daño no es reversible.

Cabe mencionar que de glaucoma en general representa hasta un 20 por ciento de la consulta en el Hraepy, y de glaucoma estrecho, un cinco por ciento.

Ávila López mencionó que cuando consulta una persona con estas características se le explica que si es de efecto refractivo puede utilizar lentes de armazón, de contacto. Si es candidato a utilizarlo, y se puede operar con láser, se realiza.

Desde nacimiento

• La hipermetropía es el resultado de la imagen visual que se enfoca por detrás de la retina, en lugar de ser directamente sobre ésta. 
• Puede ser causada por el hecho de que el globo ocular es demasiado pequeño, o que el poder de enfoque es demasiado débil.
• La hipermetropía con frecuencia está presente desde el nacimiento, pero los niños tienen un cristalino del ojo muy flexible que los ayuda a compensar el problema.

A revisión

El Colegio de Oftalmólogos de Yucatán informó que todas las personas de manera rutinaria se deben realizar estudios para los ojos, los cuales no son invasivos, no duelen y son de bajo costo, con esto se favorece un diagnóstico temprano de cualquier enfermedad que se pudiera padecer.

En caso de detectar desde la infancia algo raro en la visión, como algo blanquito, un ojo desviado o tomar actitudes como leer de lado o a una distancia que no es normal, es importante que la persona sea valorada por un oftalmólogo.

Lo ideal es que un niño sea revisado de un año a seis meses previo a si ingreso a primaria, ya que los planes de estudio están hechos para que en preescolar se trabaje en mesas donde el menor realiza sus tareas con supervisión cercana de la maestra.

Cuando pasan a primaria la maestra queda al frente, y los niños trabajan con el pizarrón y ahí es cuando la distancia cambia y se puede notar que hay algún problema.

Avanza trasplante de córneas

La tecnología, así como el cambio en la cultura para la donación de órganos, ha generado que las patologías de tercer nivel en oftalmología que se atienden principalmente en la región a través de la consulta del Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (Hraepy) puedan tener cada vez mejores pronósticos para los pacientes, como es el caso de quienes requieren un trasplante de córnea al cual ya se tiene mayor acceso.

La oftalmóloga en córnea Fiona Carolina Xacur García señaló que en ese nosocomio la atención se divide en enfermedades de la córnea, donde especialmente brinda servicio a aquellos que requieren trasplante debido al queratocono o cicatrices, así como a distrofias y queratopatía bullosa.

“Es una realidad que cada vez hay una mayor posibilidad de realizar trasplantes de córnea, porque mucha gente tiene buena disposición para donar, pero también hay quien sigue teniendo la resistencia a que su ser querido que ya falleció pueda ser un donador. Hemos tenido bastantes donaciones, pero podrían ser más”, mencionó.

Señaló que actualmente en lista de espera hay seis pacientes y hay otro tanto que ya realiza sus trámites para entrar a lista de espera. En 2013 se realizaron ocho trasplantes en este nosocomio y el año pasado fueron 19.

En cuanto al área de retina, Xacur García dijo que se atiende sobre todo retinopatía diabética, desprendimiento de retina, hemorragia vítrea, edema macular y la degeneración macular relacionada a la edad.

“La diabetes es una enfermedad que cada vez presentan más personas y esto genera que se presenten complicaciones y una de éstas es la retinopatía diabética, una de las principales causas de atención”, refirió.
En el área oculoplástica, dijo, se ocupan de todas las alteraciones que puedan aparecer alrededor de los ojos, en párpados, cejas; a nivel público sólo en este hospital se realizan cirugías de dacrosistotomía o de vía lagrimal. 

A la semana

• En el Hraepy la consulta de oftalmología oscila en unos 30 a 40 pacientes a la semana por médico (son seis especialistas).
• Aunque las cataratas y el pterigión son atendidos en segundo nivel, el Hraepy brinda servicio a los pacientes que son canalizados debido a la saturación que existe en hospitales como el O’Horán.

Observan ataquede 3 infecciones muy dolorosas

Por otro lado, el orzuelo (acumulación dolorosa de pus), la blefaritis (inflamación de los párpados) y la dacriocistitis (inflamación del saco lagrimal) son las infecciones más comunes que afectan los ojos, por lo que especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Yucatán exhortan a la población a estar atenta de los síntomas para recibir un tratamiento adecuado.

El jefe de Oftalmología del Hospital General Regional Número 12, Carlos González Cervantes, explicó que el globo ocular, con su córnea, iris, retina, cristalino y nervio óptico, forman parte importante del órgano ocular.
Además, para que el ojo tenga un buen funcionamiento existe una serie de estructuras anexas, como los músculos que lo mueven, párpados y pestañas, así como las glándulas, mismas que protegen y nutren al globo ocular, el cual puede verse afectado por distintas patologías.

Precisó que el orzuelo externo es la infección más frecuente del párpado, se produce porque el folículo piloso de la pestaña se ve infectado. Aparece como un granito o absceso que produce dolor y enrojecimiento, suele estar localizado en el borde del párpado, es pequeño y superficial.

El orzuelo interno se produce por la inflamación de una glándula de Meibonio, situada de forma más profunda que el folículo piloso, por lo que tiene dificultades de drenaje, por eso el paciente presenta mayor dolor, y es más difícil de curar.

Por lo general, los orzuelos se tratan con aplicación de calor mediante compresas con agua caliente y aplicando después una pomada antibiótica y antiinflamatoria; es importante no automedicarse, pues puede empeorar la lesión.

En el caso de la blefaritis, se trata de una inflamación del borde de los párpados, que por lo general suelen afectar a los dos ojos, y una vez que se presenta suele ser recurrente, es habitual en personas predispuestas por padecer acné rosácea o dermatitis atópica.

El síntoma principal es que el borde del párpado aparece irritado e hinchado con sensación de ardor, enrojecimiento y se presenta a cualquier edad.

González Cervantes añadió que la dacriocistitis es una infección del saco lacrimal por obstrucción; en los recién nacidos es la anomalía congénita más frecuente del sistema lacrimal, presentándose entre dos y tres de cada 10 neonatos.

Un mal que se extiende

• En la dacriocistitis aguda se forma un absceso y aparece en el ángulo interno del ojo una tumefacción dura, roja y dolorosa, que puede extenderse.
• Se trata con antibióticos, antiinflamatorios, drenaje quirúrgico, y una vez controlado el proceso agudo hay que solucionar el de base, la obstrucción; en ocasiones se puede requerir cirugía.