Abandonaron la labor de inteligencia

La Secretaría estatal de Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado han resentido el abrupto desplazamiento de mandos efectivos.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Las labores de inteligencia e investigación están ausentes en la Secretaría estatal de Seguridad Pública, lo que explica las complicaciones que está enfrentando en los primeros meses del gobierno de Carlos Joaquín González. Porque no basta con la acumulación de patrullas para marcar presencia, ya que lo primordial es la labor quirúrgica y silenciosa que entrega resultados.

La Secretaría estatal de Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado han resentido el abrupto desplazamiento de mandos efectivos o que dominaban los manuales de operación, sabiendo qué brazo de la delincuencia presionar para obtener información valiosa y reaccionar, desactivando la agresión a menudo sangrienta.

Los mandos máximos de ambas dependencias cedieron a la tentación de deshacerse de los mandos que operaron en los gobiernos de Félix González Canto y Roberto Borge Angulo, sin tener un diagnóstico de las condiciones de estas áreas con sus manuales de operación oficiales y no autorizados, pero endiabladamente efectivos.

La labor de inteligencia consiste en saber qué amígdala presionar con cortesía para obtener información sobre un brote delictivo. Las fuentes están en las cárceles municipales, donde los jefes operan y tienen todo el tablero a la vista. Porque los internos más poderosos nunca quedan aislados, y en provecho propio y de sus bandas entregan los datos que orientan a los altos mandos de seguridad pública para que no anden dando palos de ciego.

Los mandos con uniforme ya sabían qué motiva una ofensiva en Playa del Carmen o Cancún, por lo que van a lo seguro al tocar en determinada celda. La convivencia entre policías y malandrines facilita el entendimiento.

El relevo de mandos clave significó el fin abrupto de una labor de inteligencia que no se puede difundir en boletines, porque es el secreto de un trabajo evaluado por núcleos de población que se sienten más o menos seguros, según la ferocidad de los ataques criminales.

Los patrullajes son la parte visible de la seguridad pública, pero lo vital es el trabajo de inteligencia que debe ser rescatado por los nuevos mandos primerizos cuya etapa de aprendizaje explica el auge delictivo de sur a norte. 

Lo más leído

skeleton





skeleton