Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q.Roo.- Los gritos, el abandono, las enfermedades y el ser una carga para la familia,  se acentúa al pasar de los años, cuando los cuerpos se vuelven frágiles, temblorosos, con un caminar lento y con más de dos achaques por la senectud o por una enfermedad que los hacen ser invisibles ante los ojos de su propia familia,  expresó Karen Hennessy, psicoterapeuta.

En la Encuesta Nacional de Discriminación (Enadis) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) refleja que tres de cada 10 adultos mayores son discriminados y olvidados por su propia familia.

La psicoterapeuta mencionó que será importante que desde el hogar se modifique el trato hacia los adultos mayores pues muchas veces por falta de paciencia, estrés y el duelo de ver a los padres enfermos y dependientes a los hijos se olvida de sus sentimientos y se les maltrata emocionalmente.

Algunos pacientes llegan con una depresión muy fuerte porque se sienten una carga y un estorbo en su propio hogar, ellos expresan el dolor de saber que ya no tienen la misma fuerza, ni la salud de cuando eran jóvenes.

Roberta Santiago Morán, de 80 años, encontró un motivo para salir adelante pues el club de “Ayudando logramos más” de la Región 232 la hizo volver a sonreír pues se había olvidado de convivir y de disfrutar de la vida porque en casa era un bulto más para sus familiares que apenas tenían tiempo para ella pues se la vivían trabajando.

Roberta recuerda que hace dos años llegó al club para quedarse pues como una niña de escuela la dejan tres veces por semana para que se distraiga un rato. “Los demás días me quedo sentada hasta que alguien llega a casa pues una ocasión intenté caminar en el patio y me fracturé un brazo en una caída”.

El 15 de junio Naciones Unidas en su resolución 66/127 del 2006 conmemoró ese día como Día Mundial de Toma de Conciencia de Abuso y Maltrato en la Vejez, para fomentar conciencia pública sobre los problemas ligados a la violencia y los abusos contra las personas mayores.

Para Karen Hennessy el maltrato más frecuente hacia los adultos mayores es la negligencia, seguida del maltrato sicológico y el físico. Por esto, la intención de esta fecha es concientizar a la ciudadanía respecto al buen trato y cuidado que deben recibir los ancianos.

Al adulto mayor se le ve como el achacoso, el enfermo, el minusválido, cuando llegar a la vejez no necesariamente es estar enfermo o con achaques pues la vejez, explicó, es sólo una serie de cambios en el organismo a los que hay que aprender.

De acuerdo con el Consejo Estatal de Población de Quintana Roo en 2013 hay 72 mil 689 adultos de 60 años a más. Eugenio Viscarrara Marvel, de 88 años de edad, es originario del estado de Guadalajara y lleva más de 25 años de vivir en Cancún y lleva más de cinco años con su discapacidad pues le amputaron el pie izquierdo a causa de una enfermedad.

Para Eugenio la vida ha sido difícil pues a pesar de su edad y su discapacidad sale todos los días desde las primeras horas de luz para pedir limosna y llevar el sustento a su casa pues es el que mantiene a su familia. “Ando en los cruceros, en las explanadas y pido limosna para ayudar a mi hija que por sus dos hijos menores dice que no puede trabajar”.

La edad no le ha impedido a Eugenio salir a conseguir el gasto pues la gente lo ayuda mucho y a pesar de las lluvias y el sol agotador para él salir de su casa es un gran alivio pues se olvida de los problemas y se dedica a “trabajar” y no ser un estorbo en casa.

Trabaja desde las 9 hasta las 17 horas y sólo se toma el sábado de descanso pues el domingo se prepara muy de mañana para ir al tianguis de la Región 100 para poder llevar la comida a su casa.