Una silla que las mujeres no han conquistado

La gubernatura ha sido un trono prohibido para las damas quintanarroenses a partir de 1975...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

La gubernatura ha sido un trono prohibido para las damas quintanarroenses a partir de 1975, aunque han accedido a las sillas municipales en la mayor parte de los municipios desde que la profesora María Cristina Sangri Aguilar ocupó la alcaldía capitalina de Othón P. Blanco, de 1981 a 1984.

Las alcaldías, diputaciones –locales y federales– y senadurías han sido posiciones habituales para la mujer quintanarroense, demostrando capacidad, limitaciones y vicios que han sido tatuaje de los hombres, pero lo saludable es de entrada la participación habitual de las damas en zonas de competencia que fueron territorio exclusivo de los varones.

En los equipos de los gobernadores y presidentes municipales las mujeres han tenido un desempeño con todos los matices –de los excepcional a lo mediocre y deficiente–, y su participación activa ha abarcado a las dirigencias de los partidos políticos estatales. Entonces, la posición fugitiva ha sido la gubernatura, aunque dos mujeres han sido candidatas: Addy Joaquín Coldwell (PAN-Convergencia) y Alicia Ricalde Magaña (PAN), en los procesos de 2005 y 2010.

El PRI y el PAN han abierto canales de participación a la mujer, y fue precisamente Addy Joaquín Coldwell quien como senadora priista tuvo la silla diamantina al alcance de la mano cuando fue precandidata palomeada por el presidente Ernesto Zedillo rumbo al proceso de febrero de 1999; el chetumaleño Joaquín Hendricks Díaz fue candidato del PRI y vencedor en la contienda para el relevo de Mario Villanueva Madrid.

La mujer quintanarroense ha estado lista para ocupar la gubernatura, pero el tablero político ha sido adverso para ellas porque los hombres toman las grandes decisiones y se fortalecen con mucha anticipación. Basta con contemplar la alineación del proceso pasado, cuando compitieron tres candidatos fuertes por la gubernatura: Carlos Joaquín González (PAN-PRD), Mauricio Góngora Escalante (PRI, Verde Ecologista y Panal) y José Luis Pech Várguez, de Morena.

La mujer que aspire a la gubernatura debe comenzar a fortalecerse desde hoy, para que pueda iniciar su travesía hacia la silla que siempre ha sido conquistada por los hombres, a menudo con ayuda de otros hombres más poderosos.

Lo más leído

skeleton





skeleton