El secuestro de una joven empresaria de Nicolás Bravo –cerca de los límites con Campeche– tuvo un sorprendente final feliz. Privada de la libertad desde el pasado 12 de julio por la noche, Itzel Nahaibi quedó en libertad y ya está en brazos de sus familiares, recibiendo atención médica en una clínica de Chetumal.

El desenlace es una buena noticia en una zona sur donde este tipo de delitos ha sido inusual, pero en las últimas semanas casos de esta naturaleza han generado psicosis, aunque los casos han sido aclarados casi de inmediato. Pero el secuestro de Itzel Nahaibi era el mayor asunto pendiente en el terreno de la Fiscalía General del Estado.

La familia solicitó el apoyo de la Fiscalía General, pero también pidió ayuda en las redes sociales en ese mar de angustia que conmociona y doblega familias. Ahora la Fiscalía tendrá que continuar su investigación para desactivar a este tipo de delincuentes.

Hace ocho días fue privado de la libertad el ex alcalde capitalino Diego Enrique Rojas Zapata, quien fue presidente de la Canaco en Chetumal, Oficial Mayor en el gobierno de Miguel Borge Martín y delegado del ISSSTE. Su liberación fue estilo relámpago, pero un imputado fue vinculado a proceso penal y podría recibir una condena de 50 a 90 años de cárcel.

El ingeniero Rojas Zapata es un modesto comerciante con enorme prestigio en la capital del estado, por lo que su privación de la libertad se difundió en cuestión de minutos en grupos de whatsapp y Facebook.

El 17 de julio fue privada de la libertad la esposa del ex Secretario de Salud, Juan Carlos Azueta Cárdenas. La maestra jubilada fue interceptada y subida a una camioneta mientras trotaba al caer la tarde en el bulevar de la capital. Al día siguiente fue liberada.

Apenas este viernes la hija adolescente del político chetumaleño Efraín Taleno Canul nos dio un susto, pero todo quedó en una imperdonable travesura que accionó a las redes sociales y grupos de whatsapp.

Lo interesante: el tema de los secuestros y privación de la libertad en la zona sur fue fulminado en forma sorprendente, aunque la investigación de estos casos debe llegar al fondo, por la seguridad de una sociedad que quiere mantenerse libre de esta plaga que ha proliferado en otras zonas del lastimado país.