La escuela y Universidad Modelo –Campus Chetumal– festejará en plan grande tres acontecimientos en septiembre: los 107 años de su fundación en la Península de Yucatán, sus 20 años como Universidad ramificada en el sureste y sus ocho años en Chetumal, nuestra capital.

Encaminada a ser una sudorosa tradición, la casa de estudios organizará dos carreras en un tramo del bulevar Bahía, incorporando a la comunidad decidida a convivir y ejercitarse en el sitio más bello de nuestra capital.

La cuarta carrera de aniversario se efectuará este 30 de septiembre; serán dos carreras, una de cinco y otra de 10 kilómetros en punto de las siete de la mañana; 20 minutos después iniciará una caminata de convivencia para los que no estemos en condiciones de soportar el ritmo.

La directora de la Universidad Modelo en Chetumal, María Teresa Urzaiz, desglosó la convocatoria y anunció el inicio del período de inscripciones. En la carrera de cinco kilómetros, con categoría exclusivamente para alumnos de esa institución y libre para los demás a partir de los 15 años. La carrera de los 10 kilómetros tiene categoría libre desde los 18 años y una categoría master a partir de los 40.

Destaco la originalidad y efectividad de este festejo que lleva incluida una efectiva labor de promoción de esa casa de estudios ubicada a la salida de nuestra capital que ha sido cada vez más atractiva para instituciones privadas, muchas de ellas hundidas en el fango del fraude, como la Universidad Vizcaya ubicada en los dominios de una tienda de autoservicios del Tío Sam, tan cerca de la bahía.

Según testimonios que he confirmado en mi círculo de amistades e incluso familiar, la Modelo cuenta con una preparatoria de excelencia que está metiendo mucha presión a los planteles públicos y privados en Chetumal.

Su cuarta carrera debe ser un ejemplo a seguir para la Universidad de Quintana Roo (UQROO) y el Instituto Tecnológico de Chetumal (ITCH), ya que impulsa una propuesta competitiva y saludable que debe ser evaluada por Don Toño López Pinzón, el impresentable titular del Deporte que por extrañas razones permanece en su posición, causando más daño a los desalentados deportistas.