Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La tasa de homicidios en el estado, en el primer semestre del año, se duplicó, al registrar una cifra de 133 muertes violentas, mientras que en el 2016 la suma llegó a solo 65 casos, en el mismo período, de acuerdo con las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp).

El comportamiento de la violencia, relacionada con los homicidios dolosos, generó un fenómeno poco coherente, entre la capital del estado y tres de los nuevos municipios en la entidad, en relación a que Othón P. Blanco registró cuatro homicidios, mientras que Tulum, Bacalar y Puerto Morelos, tuvieron 5, 3 y 3, respectivamente, de enero a junio de los corrientes.

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Para el 2016, fue casi igual la variedad de los casos, en el mismo período, pues Chetumal reportó cinco homicidios, en tanto, Tulum, Bacalar y Puerto Morelos, documentaron 3, 4 y 4, como corresponde.

Los municipios que encabezaron la lista de asesinatos son Benito Juárez, con 95 casos y Solidaridad, con 21; estas cifras fueron superiores a las del 2016, con 31 y 13, respectivamente.

Cozumel solo registró dos homicidios, el resto de los municipios quedaron en cero en el 2017, mientras que en el 2016, Felipe Carrillo Puerto tuvo cuatro casos y Lázaro Cárdenas, uno, los demás no reportaron nada, de acuerdo a los número que maneja el órgano federal.

En Benito Juárez, de enero a la fecha, las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) llevan registradas 81 ejecuciones, relacionadas con la delincuencia organizada, mientras que en el 2016, fueron solo 61.

Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en comunicado de prensa que emitió ayer a nivel nacional, dio a conocer datos preliminares que revelan que en el 2016 se registraron 23 mil 953 homicidios.

En Quintana Roo se cometieron 12 crímenes por cada 100 mil habitantes en el 2016, según revelan los datos que maneja el Inegi y señaló que la cifra total de ese año fue de 191 casos, datos que capta de los registros administrativos de defunciones, accidentales y violentas, generados por las oficialías del Registro Civil, Agencias del Ministerio Público y Servicios Médicos Forenses.