Atienden vías destruidas por inundaciones
Son 18 tramos carreteros dañados en comunidades de Bacalar, por las inundaciones de junio pasado.
Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Tramos carreteros, como el que conduce de Bacalar a la comunidad de Reforma, que fueron dañados por las corrientes de agua provocadas por torrenciales aguaceros, ya están siendo reparados por la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra) y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
De acuerdo con información proporcionada por la oficina de comunicación social de la Sintra, están siendo atendidos 18 tramos carreteros que comunican a las distintas comunidades del municipio de Bacalar, los cuales estarán avanzando conforme lo permitan las condiciones climatológicas.
Caminos saca cosecha y puentes incluidos
Entre las carreteras que se están rehabilitando se encuentra la que conduce de El Paraíso a Buena Esperanza; Cedralito-Sinaí; Otilio Montaño-Melchor Ocampo; Otilio Montaño-18 de Marzo; Altos de Sevilla-Río Escondido; Huatusco-Isidro Fabela y Bacalar-Reforma.
De igual manera, se encuentran programados para reparación los tramos Huatusco-Payo Obispo; Rio Escondido-Huatusco; 18 de Marzo-Nuevo Canaan; Zamora-Monte Olivo y Francisco J. Mújica- Gabino Vázquez, entre otros, así como los caminos saca cosechas de las comunidades de Payo Obispo y Huatusco.
Adolfo Alberto Castañeda, presidente del Comité Directivo Municipal de la Confederación Nacional Campesina (CNC) en Bacalar, aseguró que dichos tramos carreteros forman parte del pliego petitorio que hace algunas semanas le entregaron al secretario de Gobierno, Gabriel Mendicuti Loría, que incluye además la reparación de siete puentes que quedaron maltrechos.
Afectaciones pluviales
Dichos accesos resultaron severamente dañados a raíz de las prolongadas inundaciones que sufrieron varias zonas del municipio de Bacalar, como consecuencia de los escurrimientos de agua provenientes de estados como Campeche y Chiapas en junio pasado, que provocaron extensos cuerpos de agua por espacio de varios días, que lavó gran parte de las carreteras y destruyó los puentes de acceso de más de 30 comunidades rurales.