Bacalar recibirá 'con los brazos abiertos' a proyectos amigables
Se buscará estimular el ecoturismo en las comunidades rurales.
Javier Ortíz/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Javier Padilla Balam, diputado por el Distrito XIII, al que corresponde Bacalar, se pronunció a favor de seguir impulsando proyectos y programas dirigidos a incrementar la afluencia turística en la cabecera municipal, siempre y cuando sean amigables con el medio ambiente y vayan en armonía con el ecosistema de la Laguna de los Siete Colores, como los eventos deportivos que se han venido realizando y que han cumplido este doble propósito.
Subrayó la fragilidad del ecosistema lagunar que hace necesaria la unidad entre todas las instancias de gobierno y representantes sociales para seguir manteniendo y preservar la laguna de Bacalar que se ha convertido en una fuente de empleo de ciento de familias que prestan servicio relacionados al turismo.
De ahí destacó la importancia de reforzar las acciones encaminadas al cuidado del entorno natural, para no acabar “con la gallina de los huevos de oro”, a lo que comprometió su esfuerzo como legislador para que se refuercen las labores y exista una real preservación del lecho lagunar.
También te puede interesar: Falta de permisos 'frena' trabajos de gasolinera
Dijo que en virtud del éxito que ha obtenido Bacalar como destino turístico sustentable y de bajo impacto, estimularán el ecoturismo en las comunidades rurales para incentivar la economía de las familias que habitan en el área rural, donde las posibilidades de empleo son nulas y que ha ocasionado la migración de las familias.
Comentó que durante su gira proselitista, observó varias localidades que cuentan con sitios de verdadero interés para visitar, pero no cuentan con la infraestructura suficiente para desarrollarlos y es ahí donde se requiere la participación de las autoridades para ayudarlos a contar con un sitio que les genere empleo y por ende, economía a las familias.
Mencionó que Bacalar cuenta con un sinfín de bellezas de naturales, que se puede convertir en la materia prima de una actividad que puede ayudar a la economía de las familias sin ponerlas en riesgo, siempre y cuando se desarrollen en un marco de pleno respeto con la naturaleza, como se ha venido realizando hasta ahora en la Laguna de los Siete Colores, dijo.