Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Familias que habitan en la colonia Centro y alrededores, sufrieron escasez de agua potable por 12 horas, porque cerraron la válvula de suministro principal, ante la ruptura de una tubería.

Luis Alberto Soberanis Allen, gerente de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) en Bacalar, señaló que se vieron en la necesidad de suspender el suministro desde la tarde del jueves hasta la mañana de este viernes.

Lo anterior, para reparar una tubería de cuatro pulgadas que se rompió sobre la avenida siete, en el centro de la ciudad, que provocó una fuga del vital líquido que se tenía que reparar de manera urgente, dada la cantidad de líquido que se estaba desperdiciando.

También te puede interesar:¡Toma tus precauciones! El lunes inicia trabajos Aguakan en Playa

Indicó que aunque fue resuelto el problema en las primeras horas de la mañana, fue hasta casi al medio día que se restableció el vital líquido en los domicilios, porque fueron al menos cuatro horas para que retomara el suministro normal.

Vecinos del lugar señalaron que al parecer, maniobras de las brigadas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que realizan el cambio de postes en varios puntos de la ciudad, fueron los que ocasionaron la ruptura de la red de conducción.

Familias tuvieron que racionar su consumo, en tanto los trabajadores de la CAPA reparaban la fuga y otras más, les agarró de sorpresa y se vieron en la necesidad de trasladar en depósitos el vital líquido de casas vecinas que contaban con reservas.

Paula Cen Escobar, vecina de la colonia Magisterial, indicó que dependen de algunas cubetas para su consumo, por lo que resultaron afectados con el sorpresivo corte en el suministro, “Por lo general nos avisan con anticipación cuando van a cortar el agua, pero esta ocasión de pronto dejó de salir en las tuberías”, señaló.

De acuerdo con autoridades del organismo operador, a la semana reparan entre 25 y 30 fugas, porque gran parte de la red de distribución, está conformada por tuberías antiguas de más de 20 años, que revientan con el paso de los vehículos.