Ángel Villegas/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Valió la pena la espera. Tras hora y media de retraso por la lluvia, Diablos y Tigres hicieron su aparición en el diamante del ‘Beto Ávila’ y protagonizaron un duelo de alarido, que incluso se definió en extra innings (6-5).

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El 5-5 hasta la alta de la novena, sin duda, justificó la expectativa que provocó el ‘agarrón’, catalogado como ‘La Guerra Civil’.
Marco Quevedo, por los escarlatas, y Javier Solano, por las fieras, se enfrascaron en una trepidante ‘lucha sin cuartel’. El serpentinero ‘infernal’, lanzó por espacio de dos rollos en las que aceptó los cinco ‘rasguños’ del rival, ocho imparables, un chocolate y par de bases por bolas. Le siguieron Jesús Aguamea y Luis Niebla, en tres y par de innings, respectivamente.
En contraste, Solano lo hizo en cinco episodios, en los que aceptó las cinco ‘quemaduras’ de los capitalinos, incluido un jonrón, ocho hits, cinco bases por bolas y cuatro enemigos retirados. Fue relevado por Manuel Báez, Daniel Duarte y el estadounidense, Derrick Loop.
Los bengalíes se fueron al frente en la baja del primer asalto, con par de zarpazos, derivado de un sencillo propiciado por CJ Retherford, que mandó a la goma a Alonzo Harris.
Posteriormente, José Amador haría lo propio, ahora impulsando a Carlos Alberto ‘La Chispa’ Gastelum. De esta manera, Tigres provocaba el júbilo en el graderío.

No importó la lluvia ni la espera, tras el juego que dieron ambos equipos. (Foto: Ángel Villegas)

Más tarde, en el fondo de la segunda, un wild pitch de Brian Hernández representaría la tercera ‘rayita’, que mandó a tierra prometida al receptor, Francisco Córdoba. La ventaja era de tres y parecía que los de casa se perfilaban a una cómoda victoria.
El calvario continuaba para Quevedo y los Diablos tras permitir otro par de ‘rugidos’, cuando Brandon Villareal conectó doble hacia la pradera derecha. Manny Rodríguez y Rolando Acosta hicieron efectiva las anotaciones.
Después, de forma increíble a Tigres se le vendría la noche. En un tris, cambió el panorama y los pingos comenzaron a hacer travesuras.
En la alta de la sexta, Emanuel Ávila cimbró a la afición con un jonrón por todo el bosque derecho. Con ese par de carreras, las primeras de un ‘infernal’ rally de cinco, los rojos estaban en la pelea.
Para mala suerte de los dirigidos por Tim Johnson, Carlos Figueroa se hizo presente con un sencillo al derecho. Iván Terrazas anotó.
Un doble de Jesús Fabela puso las cosas ‘color de hormiga’, con la igualada (5-5).
A partir de ese momento, ambas novenas no cedieron ningún tipo de ventaja y definieron su destino en los emocionantes extrainnings. Ahí, en el inicio de la décima, ya ante los envíos del cerrador, Raúl Barrón, los Diablos harían otra vez de las suyas, con un doble de Ricardo Valenzuela, y así adjudicarse la serie.
La derrota fue justamente para ‘El Transformer’, su primera de la campaña. El crédito fue para Luis Niebla, su tercero hasta el momento, ya que el venezolano, Jean Machi, consumaría su noveno salvamento.