Itzel Chan/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Es en primavera y verano las épocas en las que los piojos hacen de las suyas en las cabecitas de los niños de entre tres y 12 años, y que además transmiten tifo y fiebre de las trincheras.

“Los piojos no saltan, no brincan, no vuelan, pero sí perjudican, porque transmiten infecciones”, comenta el médico José Manuel Sánchez Flores, coordinador de Promoción de la Salud de la Secretaría de Salud en la zona norte, quien además alerta a los padres que es en esta temporada en la que surgen los mayores brotes de este ectoparásito.

Antes la sociedad relacionaba el surgimiento de piojos con la falta de higiene personal, pero actualmente los médicos descartan tal mito, puesto que los piojos prefieren habitar en cabezas limpias, sobre todo de los niños, porque ellos no están pendientes de la condición de su cuerpo.

Los contagios son comunes en donde hay conglomeraciones de individuos, es por ello que en las escuelas se detecta con mayor frecuencia.

Tipos de piojos:
Los que se alojan en el cuerpo.
Los que se encuentran en el pubis.
Los que habitan en la cabeza, que son los más comunes en edad escolar.

Hay cinco formas de transmisión de este tipo de parásitos, al momento de jugar, al compartir la cama, en actividades deportivas, en pijamadas, y al intercambiar objetos personales como peines, ropa y almohadas.

Cómo combatirlos 

El uso de plaguicidas para combatirlos no es recomendable, porque se hacen resistentes a la sustancia que los ataca, por lo que médicos sugieren recurrir a métodos caseros como: lavar el cuero cabelludo con agua tibia y vinagre, posteriormente cubrir con una toalla la cabeza.

El Instituto Nacional de Salud Pública emite tips al momento de retirar los piojos, es decir, no usar líquidos inflamables o tóxicos como petróleo, kerosena, insecticida ni productos veterinarios.

Personal de la Jurisdicción Sanitaria Número 2 visitará escuelas para brindar información acerca del tema.