Arte revela el tipo de violencia que sufren las mujeres en Cancún
En lo que va del año, el Centro de Justicia para las Mujeres de Cancún tiene 320 reportes de violencia.
Las mujeres de Cancún que denuncian ser víctimas de violencia, terminan por sufrir hasta cinco modalidades de maltrato, según un proyecto artístico para permitir a mujeres expresarse con diversas disciplinas.
María de los Ángeles Alonzo Mendoza, fundadora del proyecto Antal Semilla, declaró en conferencia que durante el transcurso de este 2024 se han atendido a 320 mujeres que levantaron una denuncia en el Centro de Justicia para las Mujeres de Cancún (CJM).
Pero, a pesar de que el principal daño era la violencia económica, se detectó con expresiones artísticas que estas también fueron víctimas de violencia física, psicológica, social, y hasta sus hijos se vieron afectados:
“La mayor era de 63 (años), y la más chica era de 18. La mayoría son de Cancún, destacó la región 200, la región 500, y también parte céntrica, supermanzana 60, 64”.
La entrevistada agregó que el proyecto de arte inició el pasado 26 de enero y terminó el nueve de marzo, con sesiones de interacción en el parque Kabah, en el CJM, y en el Centro cultural Toltecayotl. En este último recinto también se dieron a conocer algunos resultados.
Las actividades de arte fueron biodanza, en la que participaron 82 mujeres. También un taller llamado “La dignidad de lo roto”, donde se expresaron 25 mujeres; sesiones de yoga, con 35 mujeres; y escritura terapéutica, con alrededor de 40 chicas.
El lenguaje corporal abordó la situación de violencia de las mujeres, para evitar la revictimización por medio de una comunicación verbal.
“Cada una comparte su experiencia, y las demás que observan van detectando, observando, y sanando en el proceso”.
Asimismo, el proyecto incluyó talleres de capacitación para prevención del delito, enfoque de género y sensibilización al trauma, para profesionales del CJM, la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Mujer, y Hospital Quirúrgica del Sur, donde participaron 53 profesionales.
“El trasfondo de toda la campaña es trabajar el estrés postraumático, porque los síntomas son disociación, llanto, desesperación, llanto, vulnerabilidad, ansiedad, depresión, y esas enfermedades van a somatizarse en otras”.
Alonzo Mendoza mencionó que el objetivo del proyecto es también enseñar a las mujeres que es posible seguir adelante con sus vidas, a pesar de ser víctimas de diversas violencias.