Científicos del Centro Regional de Investigación Acuícola Pesquera (Criap) en Puerto Morelos, del Inapesca, consiguieron por segunda ocasión el desove de corales en un estanque controlado que simula las condiciones del mar, un precedente en el país para la restauración futura de arrecifes.

El equipo liderado por la investigadora Claudia Padilla Souza presenció un desove abundante de gametos, que en su interior contienen óvulos y espermas.

Para que fecunden los óvulos y espermas se tienen que mezclar con los de una colonia distinta, pero en esta ocasión solo una colonia liberó huevecillos.

“La buena noticia es que por segunda ocasión una colonia en cautiverio liberó gametos, pero la mala noticia es que no pudimos realizar la fecundación porque no había sacos gaméticos de otra colonia, fue una lástima”, informó Padilla Souza en entrevista.

Sin embargo, dijo, esto permite ir estudiando los ciclos de reproducción de las colonias de coral. Las tres colonias de coral de la especie Diploria labyrinthiformis que desovaron hace un mes provienen del mismo sitio arrecifal de Puerto Morelos, mientras que la colonia que desovó en esta ocasión fue extraída de un arrecife en Cancún. Esto indica que hay variaciones entre unos sitios y otros, por lo que esperan que para el próximo año, después de varios meses en el mismo estanque, se pueda alinear su ciclo de reproducción.

La investigadora detalló que México apenas ha dado los primeros pasos en la reproducción de corales en cautiverio, lograda hace un mes por primera vez por el mismo equipo de científicos, por lo que aún se encuentran en etapa de aprendizaje sobre el comportamiento de estos animales coloniales, sumamente complejos.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Acuacultura y Pesca (Inapesca), en el desove anterior se produjeron 500 mil larvas de coral en el proceso de fecundación, que es el primer estado del ciclo de vida de los corales, de las cuales cerca del 40 por ciento lograrán su proceso de metamorfosis y solamente entre un cinco y 10 por ciento sobrevivirán a los tres meses, ya que esta especie presenta una alta mortandad inicial.

Sin embargo, esto representa entre 25 mil y 50 mil colonias de coral que deberán mantenerse en cultivo bajo condiciones controladas hasta cumplir el año de edad, para posteriormente evaluar la posibilidad de introducirlos en el arrecife.