CANCÚN, Q. Roo.- La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) revivió la batalla legal por el Programa de Desarrollo Urbano de Cancún, al ordenar a un juzgado federal de Quintana Roo dar entrada a un amparo promovido por ciudadanos en contra del instrumento de planeación aprobado en los últimos días de la administración del ex presidente municipal, Remberto Estrada Barba.

El máximo tribunal del país, resolvió el expediente 132/2019 mediante el cual la ciudadana Enna Imelda Torres Cross y otros promovieron un recurso de queja en contra del Juzgado Séptimo de Distrito de Cancún, que en su momento, negó la admisión del amparo.

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“ES PROCEDENTE Y FUNDADO EL RECURSO DE QUEJA. SE REVOCA EL ACUERDO RECURRIDO. DEVUÉLVANSE LOS AUTOS AL JUZGADO DEL CONOCIMIENTO”, señala los resolutivos emitidos por la Segunda Sala de la SCJN, el pasado 15 de enero.

Aunque lo ordenado por la suprema corte no tiene un efecto inmediato en el PDU, que actualmente está vigente y en aplicación, sí representa la posibilidad de que un juez federal analice cada una de las supuestas violaciones a los lineamientos en materia de medio ambiente, denunciadas por ciudadanos, a través de la organización Defendiendo un Medio Ambiente Sano.

El PDU establece los parámetros que se deben respetar al momento de autorizar el desarrollo y crecimiento de un centro de población, en este caso de la ciudad de Cancún.

El documento que fue publicado el 17 de abril del año pasado, en el Periódico Oficial del Estado, estableció nuevas densidades y altura en la zona Centro, así como la Zona Hotelera.

Desde su aprobación en el Cabildo de Benito Juárez, en septiembre de 2018, unos días antes de concluir la administración del verdeecologista Remberto Estrada Barba, el PDU fue objeto de críticas, incluso, su publicación fue postergada por un recurso ante el Tribunal de Justicia Administrativa.

Entre los señalamientos de los grupos en contra, se encuentra la densificación de algunas zonas, que según los ambientalistas no son susceptibles de desarrollo, por tener sistemas de manglares, humedales y cenotes.

Afirman también que el crecimiento urbano planteado para algunas zonas como la parte centro colapsaría los servicios públicos tales como la vialidad y el drenaje, además de que no cuenta con un plan de movilidad real.