Las ideas de crear escaleras náuticas entre varios puertos, vincular diversos medios de transporte y afianzar circuitos regionales están en la agenda del sector de los viajes desde hace muchos años, pero ahora reciben un acicate, nada más y nada menos que por motivos de seguridad.

Se habla ahora de carreteras marítimas que arrancarán en los puertos de Tampico,Tamaulipas; Progreso, Yucatán y Puerto Morelos, Quintana Roo, para mover carga desde el noreste del país –convulsionado por la inseguridad- hacia la Península de Yucatán, una zona mucho más tranquila, según reveló recientemente la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

 El programa, que consiste en que por barco se lleven camiones con todo y carga, empezará a mediados del próximo año, reveló Héctor López Gutiérrez, coordinador general de Puertos y Marina Mercante de la dependencia.

 "Se moverá carga general de todo el noreste hacia la Península de Yucatán entrando por Progreso. La carga vendría de Tampico o de Veracruz", declaró.

Admitió que un factor importante para impulsar estas carreteras marítimas es la inseguridad que viven los transportistas en las vías terrestres.

 Y no es para menos. El tema de inseguridad representó el año pasado para los transportistas alrededor de 100 millones de pesos las pérdidas y según la SCT “cualquiera que quiera ahorrarse ese dinero va a querer el servicio". Como parte del impulso de esas carreteras marítimas, la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP) firmó un convenio con navieros para que sus socios muevan sus camiones con carga en los barcos de las segundas.

En el caso de las escaleras náuticas  hace casi una década se anunció que se encontraba en los primeros trazos de un proyecto para las costas de Yucatán, con la idea de conectar y aprovechar la infraestructura de varios puntos de la Península vía marítima, sin embargo hasta ahora ha sido difícil consolidar el plan. Y los circuitos regionales turísticos, aunque han corrido mejor suerte, parecen aún no afianzarse, al menos en cuanto al turismo masivo.

Llama la atención que ahora sea precisamente la inseguridad en tramos que van de Tamaulipas hasta Veracruz la que de nuevo haga virar a ver hacia el concepto multimodal, combinar, mar y tierra en el transporte, y si además se va reforzando el doble propósito del tren maya –turismo y carga- también el ferrocarril podrá integrarse a una forma más confiable de moverse hacia y desde la Península.

Si bien las aerolíneas, aeropuertos y recintos fiscales son una excelente opción, por costos y logística, tienden a distanciarse de esa estrategia de combinar diferentes medios de transporte para desafiar el reto de abatir costos, riesgos y competencia frente a la inseguridad de una parte del país, y a la vez seguir resguardando la tranquilidad de Yucatán y, en parte, de sus estados vecinos. Ya otras situaciones como los cierres fronterizos se han enfrentado diversificando el transporte; una vez más se confirma que si no hay un cambio de estrategias hacia el ingenio y la creatividad, incluso en temas espinosos, difícilmente pueden obtenerse mejores resultados con las mismas antiguas acciones.