Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La Comisión Federal de Electricidad (CFE), inició con revisiones en líneas de suministro de energía y subestaciones que dan servicio a más de 300 mil usuarios en Cancún, esto ante la llegada de la temporada de huracanes, que iniciará en junio próximo, informó Capi Madera Gil, superintendente de la zona norte. 

Comentó que la dependencia hasta el momento cuenta con 90% de los insumos como: postes, cable, transformadores, fusibles, entre otros dispositivos necesarios en caso de alguna contingencia por lluvias. 

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“Este se ocupará en el momento de que las lluvias cesen en caso de necesitarse, y de manera inmediata se le dé uso para el restablecimiento de energía, por eso es el stock y cada área se encarga en mantener los insumos listos para cualquier eventualidad”, dijo.

El funcionario comentó que para este año se estima 20% de incremento de lluvias, con base en el sistema meteorológico; sin embargo, el informe final se informará días previos al inicio de la temporada de huracanes.

Personal de la CFE realiza revisión y mantenimiento de las líneas de suministro, cambio de postes que por deterioro o accidentes viales quedaron ladeados o con daño en su estructura, además dan atención a las zonas cercanas a hospitales, escuelas y refugios para mantenerlos reforzados desde la subestación.

El año pasado, Benito Juárez instaló el Comité Especializado en Fenómenos Hidrometeorológicos, destinando 64 edificios, entre ellos 11 hoteles que fungirían como refugios, que en caso de una emergencia, albergarían a más de 16 mil personas.
“En enero tuvimos la presencia de un huracán ‘Alex’ atípico causado por el efecto del Niño, en el Atlántico, y al mismo tiempo, la tormenta tropical “Pali” en el Pacífico, también inusual en esa temporada, por ello estaremos atentos de cualquier evento hidrometeorológico”, agregó.

Hasta este momento el estacionamiento alterno de la CFE, ubicado en la Región 96, cuenta con material de abastecimiento y la dependencia asegura que en caso de necesitarse blindará el servicio de energía en los primeros 10 días para después restablecerla de manera inmediata.