Ejidatarios levantan actas contra Área Natural Protegida
Unas 183 mil 968 hectáreas contempladas forman parte de propiedad ejidal, afirman líderes.
Ángel Castilla/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Representantes de 12 ejidos posiblemente afectados con la creación del Área Natural Protegida (ANP) de 219 mil hectáreas en Bacalar y Othón Pompeyo Blanco, registrarán las actas de asamblea con la negativa ante el RAN.
Roberto Salgado Sangri, presidente del comisariado ejidal de La Península, señaló que la mayor parte del ANP que pretende constituir la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) con la complicidad de Amigos de Sian Ka’an y Secretaría del Medio Ambiente (SEMA) estatal, corresponde a propiedad ejidal.
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“Es una superficie total de 183 mil 968 hectáreas de las cuales, 84mil 987 hectáreas corresponden al municipio de Bacalar y 98 mil 981 hectáreas al municipio de Othón P. Blanco, de régimen de propiedad ejidal, en legal posesión de más de cuatro mil ejidatarios y propietarios”.
Agregó que ya levantaron las respectivas actas de asamblea con la negativa, mismas que serán registradas en el transcurso de la semana ante el Registro Agrario Nacional (RAN), con el propósito de prevenir un “golpe bajo” o una acción unilateral por parte de la Conanp.
Salgado Sangri, señaló que conforme a la Ley Agraria, son las asambleas la máxima autoridad en los ejidos, por lo que los presidentes de los comisariados de La Península, Bacalar, Aarón Merino Fernández, Buena Vista, Ejido Buena Vista, Ejido Pedro Antonio Santos, Juan Sarabia, Santa Elena, Calderitas, Laguna Guerrero, Tollocan, Calderas Barlovento y Úrsulo Galván convocaron a los ejidatarios para que se pronuncien en contra de la pretensión de la Conanp de decretar un ANP en sus tierras.
“Las actas de asamblea con la negativa han sido ratificadas y serán expedidas al Registro Agrario Nacional para que conste legalmente la negativa en contra del ANP que pretende constituir el Ejecutivo Federa vía la Conanp”.
En esas tierras existen 18 núcleos de población, donde habitan aproximadamente 50 mil personas que dependen económicamente de la actividad agropecuaria y del turismo sustentable de bajo impacto, que desde décadas atrás se desarrolla en la región.