Cierran pequeñas empresas por diversos motivos en Chetumal
Los negocios se vieron obligados a cerrar de manera definitiva por las bajas ventas.
Un total de 60 micro y pequeñas empresas de Chetumal no lograron resistir lo suficiente para ver la “bonanza prometida” por los grandes proyectos del gobierno federal: por diversos motivos bajaron sus cortinas entre mayo y junio.
La información de las organizaciones empresariales locales detalla que en aproximadamente 35 restaurantes y pequeños negocios dedicados a la venta de alimentos se vieron obligados a cerrar de manera definitiva por las bajas ventas.
Mientras que otras 22 tiendas de abarrotes, papelerías, tiendas de novedades, de ropa y otros negocios que contratan entre uno a cinco empleados sufrieron el mismo destino.
El resto corresponde a pequeñas empresas de diversos giros. La mayoría de sus dueños optaron por migrar hacia otros lugares, como Mérida, en busca de mejores oportunidades laborales.
En los lugares donde se ubicaban estos comercios sólo se encuentran letreros de “se renta”, esperando al siguiente emprendedor que se atreva a invertir en ellos.
“Tener un negocio en Chetumal es asfixiante”: explica Leonel Vargas Cabrera, quien apenas la semana pasada tomó la decisión de cerrar su restaurante, ubicado sobre la avenida Primo de Verdad, “las rentas son demasiado altas para las ganancias que se tienen en la ciudad, y casi siempre dependes de las ventas del fin de semana porque de lunes a viernes todo el movimiento está muerto”, sentenció.
De acuerdo con el Directorio Estadístico Nacionales de Unidades Económicas en el municipio de Othón P. Blanco, operan alrededor de 10 mil empresas de todos los tamaños, sin embargo, las cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportan que solamente dos mil 172 están dados de alta como patrones.
Otros comercios en Chetumal continúan cerrados como consecuencia de las inundaciones ocurridas por las lluvias de junio pasado.
Félix Plutarco Andrade, dueño de un pequeño local de reparación de celulares, es uno de ellos. Perdió casi todo su equipo cuando el agua alcanzó el metro de altura dentro de su negocio.
Decidió aplicar para los apoyos y créditos ofrecidos por la Secretaría de Desarrollo Económico. Sin embargo, menciona que hasta el momento no lo han llamado para poder recibir ese dinero, aunque en la dependencia le mencionan “que sí fue aceptado”.
“Mientras tanto llevo casi un mes sin abrir mi local. Ahorita me sostengo como repartidor, pero si sigue así tendré que cerrar definitivamente”, puntualizó.