Ernesto Neveu/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El jefe del Ejecutivo estatal, Carlos Manuel Joaquín González, se vio obligado a intervenir  para salvaguardar la seguridad de reporteros que fueron agredidos por personal de la Vocería de Gobierno del Estado, durante el evento de cambio de mando en la Policía Federal, en Chetumal, realizado en Palacio de Gobierno ayer.

Como en cada ocasión en que el gobernador acude a algún evento público, gente de la vocería anticipa que “no habrá entrevista” o “la entrevista será al final”, mientras Carlos Joaquín González llega y se dirige directamente a los miembros de la prensa.

Y ese fue el caso, relatado por la propia Rosy Dorado, compañera reportera de Canal 10 de televisión.

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“Primero dijeron que no iba a dar entrevista, pero el gober se acercó a nosotros y como Guarneros (Gustavo) se quedó del otro lado de la plaza cívica, llegó hasta el grupo y entró con todo... como si fuera un partido de futbol. Me golpeo en el brazo y me fui de lado. El gober lo vio, fue exagerado el empujón y el gober repitió cuatro veces y con voz fuerte ‘tranquilos”.

Pero el sujeto se quedó ahí, soltando codazos y pisotones. No le importó el regaño de su jefe.

“Solo me habían encargado dos preguntas y mi camarógrafo me rodeó para que no me siguiera agrediendo. Terminé y me retiré. El tipo siguió en lo suyo”.

Cuando Rosy Dorado se salía del amontonamiento de gente, Héctor Martín, también de la Unidad de Vocero, hizo lo mismo con el reportero Juan Pablo Hernández, al que empujó.

Varios de los compañeros ahí presentes señalaron a Dominga Calles Alatorre, recién nombrada jefa de prensa de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), pero también directora de Información de la Vocería, como la persona que arengó a gente de la dependencia estatal para que se adelantaran a los reporteros de diferentes medios de comunicación.

Guillermo Miranda García, director de Comunicación Social del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Dominga Calles Alatorre, se hicieron de palabras, incluso altisonantes, mientras los reporteros continuaban en los suyo.

Este altercado, que no pasó a mayores por la atención que prestó de inmediato el gobernador Carlos Joaquín González, ya se repitió en otras ocasiones, pero a manos de su equipo de seguridad, jaloneando a los reporteros cuando intentan acercarse al mandatario, quien en cada oportunidad ha pedido a su gente “calma”.

El asunto de ayer en la entrevista no pasó a otros niveles, pero sí llama la atención la postura hasta cierto punto agresiva adoptada por la gente que apoya al mandatario estatal.