Cosecha de caña de azúcar avanza, pero con complicaciones en Q. Roo
Aunque por ahora no hay un retraso importante en la cosecha, cada tonelada que no se está moliendo son 900 pesos que pierde el productor.
La cosecha de caña de azúcar en el sur de Quintana Roo, lleva un avance de 140 mil toneladas entregadas al ingenio San Rafael de Pucté, aunque se podrá concluir en tiempo y forma y no sufrir afectación por la temporada de lluvias como el año pasado, los productores afirman que han tenido complicaciones.
Evaristo Gómez Díaz, presidente de la Unión Local de Productores de Caña y Azúcar de Quintana Roo (ULPCA) dijo que la zafra 2022-2023 lleva un mayor avance, sobre todo porque el año pasado en la cosecha 2021-2022, por estas fechas no se había iniciado con el corte, alce y molienda de la gramínea.
“Llevamos un avance, aunque con muchas complicaciones, las cuestiones climatológicas han afectado significativamente en la cosecha, los campos no están en condiciones, tenemos mucha producción para este año, con un estimado de cosecha de un millón 900 mil toneladas por cortar”, comentó.
Dijo que este progreso ayudará para que no se quede caña debido a las lluvias para el final de la temporada. Por ahora están cosechando las partes altas y esperan que el clima mejore para cumplir con la cuota diaria que se tiene con el ingenio.
“Tenemos que entregar más de nueve mil toneladas de caña diariamente al ingenio San Rafael de Pucté y a veces se cumple y a veces no, debido a que en algunos ejidos todavía llueve y no se puede quemar la caña, pero tenemos fe en que pronto se restablezca la cosecha”, refirió el dirigente cañero.
Este año le están apostando a la tecnología y cosecha mecanizada, ya que en los últimos años cada vez es más difícil y costosos conseguir mano de obra para el corte de caña, ya que los jornaleros tienen mejores ofertas en otros estados, en trabajos menos difíciles.
Benjamín Gutiérrez Reyes, presidente de la Asociación Local de Productores de Caña de Azúcar de la ribera del Río Hondo, aseguró que de entrada, los productores ya tienen entre 30 y 45 pesos de deuda por gastos de cosecha por tonelada de caña, por lo que es necesario que se corte en tiempo y forma para tener buenos rendimientos.
Señaló que aunque por ahora no hay un retraso importante en la cosecha, cada tonelada que no se está moliendo son 900 pesos que pierde el productor, pero que puede recuperarse alargando el tiempo de cosecha, pero también aumenta más los gastos de la misma.
“A veces solo entregamos cuatro o cinco mil toneladas, quedando un rezago de otras cinco mil que no se están moliendo, lo que representa pérdidas económicas para los productores de caña”, finalizó.