Sara Cauich/SIPSE
TULUM, Q. Roo.- Los precios del metro cuadrado de la tierra en Tulum pasaron de 500 pesos a mil 500 pesos en promedio con el anuncio del proyecto del Tren Maya en la región, específicamente la ruta Cobá-Valladolid.

Carlos Salas Minaya, director de Catastro en el municipio, explicó que los precios de la tierra en la zona aumentan casi todos los días, siendo la zona urbana la que tiene un valor más alto que el área rural sin servicios.

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En la franja de Tulum a Cobá, los que cuentan con títulos de propiedad alcanzan precios que van de 50 a 100 pesos el metro cuadrado ante Catastro, aunque en términos comerciales pueden llegar hasta mil 500 pesos.

Explicó que el precio comercial suele ser más alto que el establecido en el Catastro, hasta en un 70 por ciento arriba, y esto de acuerdo a la ley en la materia, la cifra en que sea cerrada la transacción será el nuevo valor catastral que tendrá el área donde se concreta la operación.

Los valores más altos se registran en los predios que dan a la playa, o bien los que se encuentran a orilla de carreteras si son predios rústicos, señaló.

Por su parte, Fernando Aznar Pavón, agente de bienes raíces de Tulum, dijo que el mercado inmobiliario en ese municipio se mueve de acuerdo con la demanda, con precios que han duplicado el costo del metro cuadrado.

Indicó que desde el anuncio del proyecto para construir lo que denomina el gobierno federal Tren Maya, los precios subieron; sin embargo, a la fecha no se concreta esta propuesta y mientras más tiempo se lleve el arranque el proyecto irán a la baja nuevamente.

El masivo recale de sargazo en los dos últimos meses también impactará de forma negativa en el valor de la tierra principalmente en la costa.

Agregó que el proyecto tiene un efecto especulativo, “cuando se ponga la primera piedra van a subir aún más, y cuando esté funcionando los precios subirán de nuevo”.

A pesar de ello, hay inversión en la zona de unos 70 desarrollos inmobiliarios, hoteleros y comerciales en construcción, y siguen llegando inversionistas.