Desde hace un mes, una maquinaria se encuentra rellenando los manglares ubicados en las inmediaciones de Puerto Cancún, especie protegida por la Norma Oficial Mexicana 059, por su alta importancia en el medio ambiente costero.

La práctica ilegal en el proceso de construcción y adecuación del desarrollo Puerto Cancún, a la fecha no ha sido suspendida por las autoridades responsables de cuidar el ecosistema, como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), denuncian vecinos del condominio.

La zona donde actualmente se rellena forma parte de la laguna Morales, el último sitio de manglar inundado que quedaba en Puerto Cancún frente a la playa, un humedal que fue rodeado por construcciones y un club de playa.

Lo primero que se hizo fue tapar el flujo de agua entre el mar y esta pequeña laguna, lo cual  condena a los manglares a morir en el mediano plazo, advirtió Patricia Santos, especialista en la materia.

Los vecinos del lugar creen que el desmonte de vegetación será para construir un nuevo hotel, aunque existen varias versiones sobre cuál será la cadena hotelera que ocupe este predio costero.

“Están rellenando desde hace un mes, todo el día están trabajando. Ya le llamamos al municipio, pero ninguna autoridad se ha parado”, dijo una de las residentes.

De acuerdo con Patricia Santos, reconocida a nivel internacional por su trabajo en la restauración de manglares en Indonesia y Vietnam, de estos bosques inundados depende la subsistencia de las poblaciones costeras y, en el caso de Cancún, de toda la infraestructura turístico-residencial que hay al pie del mar.

La zona afectada forma parte de la laguna Morales. (Paola Chiomante)

La especialista apunta que los manglares actúan como una barrera protectora entre el agua y la tierra, previniendo la erosión de las costas y reduciendo el efecto de oleajes y marejadas durante eventos climáticos extremos. Son una especie de escudo ante tormentas y huracanes.