Abigail Becerra/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- ¡Ten cuidado! La violencia aumentará ¡Reacciona! No te dejes destruir ¡Necesitas ayuda profesional!: Son algunas de las leyendas que contiene el violentómetro, un flayer repartido en las pláticas itinerantes de prevención a la violencia en la zona norte del estado que ofrece el Instituto Quintanarroense de la Mujer (IQM).

Mildred Ávila Vera, delegada del IQM en Benito Juárez, explicó que las mujeres que están en una situación de vulnerabilidad tienen más posibilidades de experimentar violencia en cualquiera de sus tipos, porque tiene que ver la falta de preparación básica, como saber leer y escribir, condición socioeconómica y cultural.

Por esta razón, indicó que de forma interactiva se empleó esta estrategia visual y descriptiva para que sepan reconocer qué encuadra violencia psicológica, emocional, económica, física o sexual y frenarla con la denuncia.

“En muchas ocasiones nos enfrentamos con la naturalización de la violencia, la ven normal y como parte de lo que les tocó vivir, y además responsabilizarse de los sucesos violento hacia su persona”, apuntó.

Comentó que con esta estrategia se pretende que sepan que la violencia se denuncia y sanciona para poder erradicarla, además de orientarlas en generar comunicaciones asertivas y resolución de conflictos con los demás miembros de la familia y en cualquier ámbito de la vida para construir relaciones sanas y armónicas.

El requerimiento de ayuda judicial e institucional es cuando hay amenazas de muerte, relaciones sexuales forzadas, abuso sexual, violaciones y mutilaciones, porque el siguiente paso es el asesinato.

El porcentaje de mujeres de 15 años y más que sufrieron al menos un incidente de violencia por su pareja en el estado, alcanzó un 33.5 por ciento, de las cuales la violencia emocional ocupó el primer lugar, según el Instituto Nacional de las Mujeres.