Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La bala entró por el hombro izquierdo y salió en la séptima costilla. Las autoridades aún no definen el calibre del arma con el que hirieron al plomero Ángel N., de 21 años, pero todo parece indicar que es un .38 Súper. La versión que tienen los judiciales es que se estacionó un vehículo frente a un domicilio de la colonia Donceles 28, bajó una persona alta, morena y disparó contra el joven, quien se encuentra internado en el Hospital General “Jesús Kumate Rodríguez”. 

La Procuraduría General de Justicia del Estado inició la averiguación previa 3147/2014, por el delito de lesiones, contra quien resulte responsable. De acuerdo a un testigo, que estaba con unos conocidos, dijo que aproximadamente a las 4:30 horas, se estacionó en un costado del andador Francisco Javier Mina, de la Supermanzana  64, un vehículo, tipo Corsa, color blanco, con vidrios polarizados. El conductor, al ver que había mucha gente en la zona, decidió darle la vuelta, para situarse en el otro extremo.

El automovilista frenó bruscamente y descendió del vehículo un sujeto que tenía sport negra, pantalón verde, botas militares; éste tenía una toalla envuelta en el brazo. El testigo alcanzó a ver que portaba un arma de fuego y que se dirigía a ellos. El individuo miraba hacia las viviendas como si buscara a alguien.

Hallan un casquillo y manchas de sangre

Pero ya estando cerca, le apuntó a dos de sus amigos, escuchó una detonación que hizo que se metieran corriendo a su casa. Otro de los presentes dijo la misma versión a los elementos de la Policía Judicial del Estado. Cuando salieron ya se había ido el agresor.

Las autoridades de la PGJE encontraron en la escena un casquillo, al parecer calibre .38 Súper, y pequeñas manchas de sangre. En el Hospital General se encuentra internado Ángel; se reporta como delicado de salud.