Ejidatarios de Bacalar acusan al gobierno de “obligarlos” a vender sus tierras
Las políticas ambientales que proponen la Federación y el estado sólo las pueden cumplir grandes capitalistas.
Las normas ambientales que el gobierno federal y estatal pretenden implementar en la laguna de Bacalar, solamente pueden ser cumplidas por grandes capitalistas, y a los ejidatarios les es más fácil vender, que cumplir con todos los trámites regulatorios federales y estatales.
Roberto Salgado Sangri, vocero del Consejo Comunitario de la Cuenca de la Laguna de Bacalar (Concclab) dijo que las autoridades estatales expresan su “disposición al diálogo”, pero promueven foros ambientalistas cuyo único fin es justificar el establecimiento de regulaciones ambientales bajo figuras que pueden variar de nombres, desde un Área Natural Protegida (ANP) o Hábitat Crítico.
Pero que en esencia, lo que se pretende es implementar normas que solamente pueden ser cumplidas por grandes capitalistas, como está sucediendo en la franja costera del ejido Buenavista, que en su totalidad ha sido vendida a foráneos.
Expresó que en el ejido Buenavista las mejores tierras costeras han sido entregadas a revendedores, quienes comercializan con inversionistas foráneos, que ya han construido o planean el desarrollo de residencias ecoturísticas.
“En tanto que los ejidatarios locales carecen del capital para cumplir las regulaciones y mucho menos para solventar las elevadas multas, por lo que prefieren vender”.
Salgado Sangri agregó que los ejidatarios prácticamente están ante un despojo legalizado, que ha dejado a los propietarios originales de la tierra sin posibilidades de acceder al desarrollo y a los beneficios de la plusvalía de sus tierras.
“Desafortunadamente, la hipocresía ambiental de estos grupúsculos ambientalistas financiados por organismos internacionales, ha generado la exclusión de los ejidatarios del desarrollo que registra Bacalar; obviamente, junto con el Tren Maya se ha incrementado el interés por los mejores terrenos de Bacalar”.
Añadió que el Gobierno del Estado tampoco ha mostrado un interés real para orientar a los ejidatarios y a los pequeños propietarios sobre las oportunidades que se van a generar; pero, sí se han aliado con neo liberales, en contra de los intereses de los ejidatarios y de los pequeños propietarios.