Casi la mitad de los negocios en Quintana Roo no tienen considerado aumentar el salario de sus trabajadores para el próximo año, debido a que consideran que la aplicación de las nuevas reformas laborales, como la menor jornada laboral, los días “extras” de descanso y el “doble aguinaldo”, pondrán en serios aprietos su economía.

Así lo dio a conocer la firma especializada en recursos humanos y consultoría Aon, la cual reportó que el 47% de los empleadores o patrones negaron la posibilidad de algún incremento al sueldo de sus empleados, lo que pondría en riesgo su poder adquisitivo ante el impacto de la inflación.

La consultora en su Encuesta de Compensación 2023 detalla que el 53% de las empresas sí tiene previsto un ajuste salarial para su personal; pero este grupo, integrado por 34 mil 281 negocios, en su gran mayoría apenas pagan el salario mínimo, por lo que el aumento que contemplan en realidad se trata de lo estipulado por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos.

Quiere decir que si se toma en cuenta la propuesta previa de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y el Conasami, éste quedaría en 233.99 pesos, lo que equivale a 797 pesos más al mes.

Pero si se toma en cuenta que por la tendencia actual de la inflación, la renta y la canasta básica subirán de precio en mil 284 pesos para el próximo año, el incremento al sueldo sería insuficiente.

También se explicó que los aumentos mayores a este número se darán hasta después de abril, una vez que se tenga seguridad de que existen las condiciones económicas para mejorar los salarios.

La consultora Aon señaló que casi todas las 36 mil 327 empresas que respondieron que no van a aumentar el pago a sus empleados, ofrecen remuneraciones que van desde los 1.5 hasta los tres salarios mínimos.

La mayoría son medianas y grandes empresas que consideran que el 2024 será un ensayo para estudiar el impacto de la reforma laboral, por lo que no están interesadas arriesgarse en otorgar mayores prestaciones.