En Quintana Roo el 62% de los 35 mil jóvenes profesionistas son rechazados por las empresas, siendo la falta de experiencia laboral la principal razón. Ni siquiera el programa “Jóvenes Construyendo el Futuro” ha servido para solucionar esta situación.

La información de Data México revela que de los 192 mil 100 profesionistas registrados en el Caribe Mexicano, el 18% tiene entre 24 a 28 años. Es decir, son considerados recién egresados, aunque sólo 4 de cada 10 de este grupo trabajan en alguna empresa formal.

“Ni siquiera hablamos de un empleo relacionado con su profesión, sino de un trabajo formal. Los recién egresados hoy son más rechazados que hace 10 años, casi en más del doble que anteriores generaciones”, declara Elías Soto Caamal, abogado y reclutador para empresas de la región Península.

Citó que ha recibido línea de rechazar a estos jóvenes profesionistas a pesar de haber aprobado las entrevistas “teóricas” para empleo.

“Eviten contratar a recién graduados. Y esto también va para mis compañeros reclutadores. Por eso no sorprende que la consultora ESSAD, experta en gestión empresarial en México, citara que el 82% de las compañías en la zona sur no confía en las habilidades y comportamientos de los universitarios”, declaró.

Explicó que en este punto mucho tuvo que ver el programa Jóvenes Construyendo el Futuro: la mayoría de los jóvenes que llegaron con estas becas demostraron un pésimo desempeño con actitudes como rechazo a la autoridad, falta de compromiso en el horario laboral, exigencias de tiempos de descanso ridículas, o poca disposición para aprender nuevas habilidades.

“Entonces por ese primer acercamiento con la juventud profesionista las empresas dijeron: suficiente, este sector no funciona. Además, la rotación de meses para estos jóvenes, que siempre andan buscando trabajos más cómodos, influye también en que se conviertan en los rechazados del sistema laboral”, puntualizó el especialista.

A pesar de lo anterior existen unos pocos casos de éxito, mencionó el reclutador, pero también fue sincero al resaltar que estos jóvenes que sí demostraron la suficiente habilidad al cabo de unos meses deciden mudarse hacia el norte del país, donde acceden hasta el doble de remuneración.