Buscan solución ante 'desiertos' provocados por tala de árboles para Tren Maya
Investigadora puntualizó que las afectaciones al ecosistema no sólo incluye la deforestación.
Investigadores y biólogos afirmaron que el Gobierno Federal no ha hecho nada para mitigar el daño ambiental provocado por la tala de árboles y la pérdida de fauna, derivado de los trabajos del Tren Maya en Quintana Roo.
María Magdalena Vázquez, investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Quintana Roo, puntualizó que las afectaciones al ecosistema no sólo incluye la deforestación de cientos de miles de hectáreas de selva, sino también las zonas que hoy se han convertido en humedales por las inundaciones provocadas por los “diques” en los que se convirtieron los rieles del tren.
“Habían dicho que sí tenían un programa de recuperación de flora y fauna, pero vemos que esto no fue verdad. El Tren Maya está modificando para mal varias zonas a lo largo de su recorrido, pues donde antes eran extensas áreas verdes hoy ya comienzan a parecer campos estériles”, puntualizó la especialista.
Citó como ejemplo las especies edáficas, como baterías, hongos y ácaros que se encargan de la estructura y fertilidad del suelo, pero que murieron tras ser sepultados por toneladas de material pétreo.
“Cuando le quitas a la cadena alimenticia un ser tan pequeño pero necesario para la conservación del ecosistema, sucede lo que hoy somos testigos: entre Cancún y Escarcega podemos encontrar tramos donde ya no parece una zona verde, sinoun desierto”, declaró la especialista.
Comentó que han solicitado información y acceso a las autoridades encargas del Tren Maya, pero hasta el momento se los han negado, lo que catalogó de preocupante pues es necesario continuar con los estudios para determinar el daño y después presentar políticas de recuperación.
Citó que la investigación que está llevando a cabo junto con otros colegas va a concluir en el 2025, pero los datos preliminares confirman lo que muchos habían advertido: se realizó el proyecto federal pero sin entender siquiera sus consecuencias para el medio ambiente.