Romana Rivera caminó varios kilómetros por la zona hotelera de Cancún cargando con la foto de su hija Diana en sus manos, lo hizo custodiada de varios elementos de la policía, quienes la madrugada del 22 de febrero no pudieron impedir que desconocidos se llevara a la joven.

“Fue a casa de la familia de su papá. Hablé con ella a las nueve de la noche y quedamos en vernos la mañana siguiente porque cuando salía prefería que no viajara en transporte, yo la esperaba el sábado, le marqué y ya no me contestó, sus parientes no me dijeron nada sobre que había salido después”, dijo.

La única pista que Romana tiene de Diana es que tanto ella como el joven que la acompañaba esa noche fueron abordados por desconocidos, quienes los subieron a un vehículo.

Ante la impotencia de no tener avances en la investigación, decidió unirse a “La Marcha sin Miedo”, que un grupo de mujeres organizó este domingo para exigir justicia en el caso de las desaparecidas y víctimas de feminicidio.

Junto a casi más de 100 personas, Romana marchó desde la entrada de Puerto Cancún (sobre avenida Bonampak) hasta el kilómetro cinco de la zona hotelera donde se ubica el asta bandera, punto en donde narró una vez más la historia de su hija.

“Yo me uní a ustedes para alzar la voz por Diana. Hoy son nueve meses sin que la autoridad de información para dar con su paradero. Alcemos la voz señores, no es justo que Cancún este hundido, por eso le pido a la ciudadanía que se una a gritar por ella, por Alexis, Ingrid y todas las que no están”, dijo.

El contingente  marchó de manera pacífica en medio de un robusto contingente de seguridad que incluyó elementos de Tránsito, policía estatal, protección civil, la Comisión Nacional de Radio Auxilio y una ambulancia de la Secretaría de Salud del Estado (Sesa).

#Cancún | Mujeres marchan pacíficamente desde Puerto Cancún y sobre el bulevar Kukulcán en protesta contra los feminicidios. (📸 Fernanda Duque) pic.twitter.com/ezc8eUzZWQ

— Novedades de Q.Roo (@novedadesqroo) November 22, 2020

Al finalizar el grupo se separó y poco a poco cada una tomó su camino, sin embargo Romana permaneció unos minutos más para que todos pudieran observar la fotografía y la ficha de búsqueda de Diana, con el anhelo de que algún día alguien le de una pista sobre su destino.

"Es la única, sólo la tengo a ella y ella sólo me tiene a mi, nunca la voy a dejar de buscar" afirmó una y otra vez.