Habitantes de tres zonas distintas del centro y sur del Estado amenazaron con bloquear igual número de puntos de las carreteras federales, para exigir la solución a sus respectivos problemas.

Primero los habitantes de la zona limítrofe de Quintana Roo anunciaron que la próxima semana, en un día sin confirmar, van a detener el tráfico en la carretera 186 a la altura del poblado de Nicolás Bravo, como medida de presión para que la Secretaría de la Defensa Nacional cumpla con los acuerdos de reparar los caminos destruidos por la maquinaria pesada al servicio del Tren Maya.

Adelantaron que podría ser indefinido, ya que de acuerdo con Leobardo López presidente del comité de comunidades, no se moverían hasta que se concluyan las obras que demandan.

“Se comprometieron a que sería este 2 de octubre cuándo comenzarían con los trabajos de reparación de los caminos que están dañados por las obras del Tren Maya, además de hacer bacheo en calles y construir un paso a desnivel bien diseñado, todo eso fue un compromiso firmado en una minuta por el Teniente Coronel Luis Calderón y fuimos testigos los representantes de los 37 ejidos de la zona limítrofe, pero llegó el día y no cumplieron, entonces les vamos a dar una semana más, sino ya acordamos que tomaremos la carretera, porque es la única manera de ejercer presión y que cumplan.”

También los habitantes de Pantera, en Bacalar, advirtieron que a partir del martes bloquearían la carretera federal 293 de “vía corta a Mérida”, si la Comisión Federal de Electricidad no reestablece el suministro eléctrico que se interrumpió hace cuatro días.

La comunidad ha dejado en claro que la acción de bloqueo es una última opción, pero necesaria para garantizar que las autoridades atiendan su demanda de manera inmediata. La falta de electricidad afecta no solo la vida diaria, sino también la seguridad y las actividades económicas de la zona.

Mientras que habitantes de la comunidad de trapiche, ubicada a 32 kilómetros de José María Morelos, adelantaron que también cerrarán la carretera federal, en su caso la 184, si la Secretaría de Obras Públicas estatal no cumple con la promesa de reparar la calle principal, la cual es utilizada como vía de tránsito y mercancías, pero que desde las lluvias de junio pasado quedó inservible.