Más de 1 mil 500 habitantes del municipio de Bacalar serían reubicados en zonas no inundables, pues actualmente su vida corre peligro durante la temporada de lluvias.

El presidente municipal José Alfredo Contreras citó como ejemplo que hoy más de 60 familias de la colonia Diego Rojas Zapata aún no han podido regresar a sus hogares pues el agua todavía no ha cedido a casi seis días del paso de la última tormenta.

“En estos momentos estamos trabajando en coordinación con autoridades estatales, así como dependencias federales como la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de la Defensa Nacional, para drenar toda el agua que se pueda y así ayudar al secado de esta zona. Lamentablemente por encontrarse en una zona de humedal es posible que vuelva a inundarse con otras lluvias fuertes”, explicó.

Por este motivo dijo que ya están trabajando en nuevas opciones para ubicar a esta población y la de otras comunidades y asentamientos que atraviesan por el mismo problema.

Sin embargo, enfrentan un gran obstáculo: el Ayuntamiento no posee reservas territoriales.

“Aquí es donde estamos viendo en conjunto con la Agencia de Proyectos Estratégicos de Quintana Roo alguna opción para estas personas, porque nosotros no poseemos tierras para entregarles. También debemos verificar que su nuevo hogar no esté en zonas que también se inundan porque al final de nada habrá servido todo el trabajo”, declaró el alcalde.

Añadió que incluso buscarán un acercamiento con el Ejido Bacalar para que les donen algunos terrenos que puedan ser utilizados para este fin.

“En los primeros acercamientos nos dijeron que sí están en la disposición de ayudar. Aquí debemos de tomar en cuenta que no hablamos de especuladores o personas recién llegadas, sino hijos de habitantes de Bacalar que buscaron tener su propio hogar, pero escogieron un mal sitio”, declaró José Alfredo Contreras.

Aclaró que, en el Plan de Desarrollo Urbano de Bacalar, presentado hace un par de meses, ya se advierte que esa zona inundada está sobre un humedal. Se trata de una zona baja que no debió ser utilizada como colonia, debido al riesgo que representa.