Festejan el onceavo cumpleaños de "Daniel" el manatí

El ejemplar ha crecido en semicautiverio, fue encontrado en el 2003 por unos niños.

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El mamífero es alimentado con zanahoria, jitomate, betabel, brócoli, coliflor, lechuga, entre otros. (Redacción/SIPSE)
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Redacción/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El centro de Rehabilitación de Mamíferos Acuáticos (Carma), el Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (Sema), en coordinación con autoridades municipales, festejará el onceavo cumpleaños de “Daniel”, un ejemplar de manatí antillano.


“Daniel ha crecido en semi cautiverio, constituye el primer esfuerzo  por rehabilitar, liberar y monitorear a un ejemplar de esta especie en nuestro país…”

Vale la pena señalar que el desarrollo de Daniel en semi cautiverio, crianza, rehabilitación, liberación y monitoreo actual, es de mucho éxito; desde que  fue encontrado el 14 de septiembre de 2003 a la edad de una semana de nacido en las orillas de Laguna Guerrero.

"Daniel" el manatí

El pequeño ejemplar de manatí fue encontrado por unos niños que lo observaron atorado en las raíces del manglar, luego se procedió a trasladarlo a la ciudad de Chetumal donde fue atendido por especialistas de El Colegio de la Frontera Sur con el apoyo técnico de Africam Safari en aspectos de medicina y fauna silvestre.

De acuerdo a informes de Ecosur, “Daniel” era evaluado cada semana para verificar su estado de salud y su incremento de peso, posteriormente las evaluaciones se realizaron cada 15 días y más tarde una vez al mes. Después de superar esta  primera etapa y haber alcanzado un peso de 90 kilogramos, fue liberado a la edad de un año y dos meses con un sistema de marcaje (cinturón, varilla y radio-transmisor) el 7 de julio de 2005, en la misma Laguna Guerrero.

Laguna de Guerrero

El ejemplar ya con dos años de edad se trasladó de nuevo a los encierros en Laguna Guerrero el 17 de febrero de 2006 pesando 60 kg y con un alto nivel de deshidratación, se le retiró entonces el sistema de marcaje. Los resultados del análisis hematológico mostraron que Daniel no sufría de procesos infecciosos, sin embargo, su estado físico mostraba una desnutrición severa.

Desde entonces se le alimentó intensivamente con zanahoria, jitomate, betabel, brócoli, coliflor, lechuga, espinaca, acelga y germinado de soya. En febrero empezó comiendo cuatro kilos diarios de vegetales y llegó a consumir hasta 20 kg, lo que hizo que el ejemplar poco a poco se recuperara de su estado de desnutrición.

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