Las iglesias se saturaron ayer en el Domingo de Ramos, y el Santuario de María Desatadora de Nudos fue uno de los que más aforo tuvo, donde locales y extranjeros fueron a pedir por sí  mismos y por otros.

Desde antes de la primera misa, Desatadora de Nudos se llenó hasta rebosar de feligreses, quienes tras conseguir una palma para participar en la celebración de inicio de la Semana Santa.

Esto mismo también pasó en otras iglesias de Cancún.

Luis Pablo Garza Aguilar, fundador del Santuario de María Desatadora de Nudos, comentó que ayer se esperó recibir en todo el día a aproximadamente seis mil creyentes de todas las edades, en lo que fue también el octavo aniversario del santuario, también en un Domingo de Ramos.

El sacerdote recibió a los creyentes, leyó un pasaje del Evangelio sobre la entrada de Jesús a Jerusalén, y se procedió a bendecir con agua bendita las palmas de la gente antes de entrar a la capilla y tomar asiento para escuchar misa.

Durante la liturgia, el sacerdote hizo hincapié en que el objetivo del Domingo de Ramos es para que escuchar sobre la Pasión de Cristo, pueda haber un cambio en el corazón de los fieles.

Es decir, se explica que el sufrimiento y la muerte de Jesús fueron para salvar a cada persona del mundo, y en el marco de la fecha todos se deben cuestionar que se va a hacer por Él para cambiar y ser mejores.

“Es un tiempo para pedirle a Dios favores especiales, pedirle por nuestros enfermos, si traemos un sufrimiento personal pedirle que nos ayude a cargar la cruz. La contemplación de los misterios de la Semana Santa, de la Pasión, es una oportunidad para nosotros encontrar fuerzas y cargar con nuestra propia cruz”,

explicó Garza Aguilar

En otras iglesias, como la Catedral de Cancún, la multitud rebosó la capacidad de los recintos, principalmente durante las misas de la mañana y las primeras dos horas de la tarde, donde alrededor de mil personas se dieron cita.

Con esta tradicional conmemoración, da inicio la Semana Mayor en la que se recuerda la Pasión de Nuestro Señor.