Especialistas en cuidado animal exhortaron a los ciudadanos a cuidar la integridad de las mascotas en Cancún, mediante el no uso de pirotecnia, lo cual puede causar nuevos incidentes de agresiones y hasta convulsiones en perros.

María Margarita Solís Domínguez, rescatista independiente, comentó que como los perros tienen un oído tres veces más sensible que de las personas, con reventar cualquier pirotecnia es suficiente para que peleen entre ellos o muerdan a una persona, situación que se presentó a finales de 2022.

Durante los días festivos de este 2023, rescatistas de colonias irregulares de la ciudad reporta ron estruendos de estos artículos de pólvora, lo que derivó en constantes ladridos y ansiedad en los animales de las casas.

“Ellos escuchan tres veces más fuerte que nosotros. Ellos se ponen nerviosos, empiezan a querer despedazar la jaula donde están, ellos no pueden estar libres porque si están libres se suben, se bajan, corren, andan buscando dónde esconderse”, dijo.

Agregó que para las fiestas los animales deben conservarse todo el tiempo en los hogares, principalmente si se habita una zona donde los residentes usen pirotecnia.

Además, antes de la llegada de las fiestas se deben preparar los dueños con diferentes medidas tranquilizantes para sus mascotas.

No hay una medida que sea la más eficiente porque eso depende de cada mascota, pero los rescatistas sugieren ir con el veterinario y aceptar técnicas como aromatizantes, renovar los juguetes del perro para que los muerda, tapones para los oídos y más.

Emel Osorio Ceballos, entrenador de la escuela de entrenamiento positivo Edupeek, señaló que durante los estruendos es normal ver a los perros moverse por la casa y buscar la zona más tranquila posible donde huir del ruido.

Pero, un error común es tratar de sacar a las mascotas de sus refugios, ya que eso termina normalmente en una mordida, por lo que además de hacer compañía permanente al perro, sugirió que se le de oportunidad a los animales de procesar el estrés por su cuenta.

A pesar de que hay personas que son conscientes del daño de la pirotecnia, también hay quienes hacen caso omiso de las recomendaciones y explotan “cuetes”.

Y esto sin temor a represalias, ya que el uso de estos artefactos y su daño no se contempla en la Ley de Protección y Bienestar Animal de Quintana Roo. Pero lo que sí se establece es que en caso de que los animales domésticos se salgan de sus casas para escapar del ruido, la responsabilidad es de los dueños.