Las autoridades judiciales y del sector ambiental han fracasado en la protección del Santuario de la Tortuga Marina en Chemuyil, donde Grupo Posadas edifica un complejo de cuatro hoteles sin pudor antes las suspensiones legales, expuso Gisela Maldonado Saldaña, del Grupo Tortuguero del Caribe.

La especialista apuntó que el caso Chemuyil, donde la empresa no ha respetado las dos suspensiones definitivas dictadas por jueces ni tampoco la clausura ordenada por el Ayuntamiento de Tulum; es un ejemplo del estado fallido que persiste en México, pues las autoridades no tienen la capacidad elemental para hacer valer la justicia.

“Desafortunadamente México es un estado fallido. Y no es una declaración incendiaria, cuando un país no es capaz de garantizar justicia para sus gobernados, entonces hablamos de un Estado fallido. En este caso (el de Chemuyil) se han violado todos los preceptos del marco legal aplicable. Han violado todas y cada una de las instrucciones de jueces, porque aquí ya no estamos hablando de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ni de la Fiscalía, sino del Poder Judicial”, dijo la activista.

(Cortesía)

Afirmó que esta desobediencia se debe a que no hay ejemplos de justicia más contundentes, como demoliciones de las obras que hayan sido construidas violando la Ley.

“No le han hecho caso ni al Poder Ejecutivo ni al Poder Judicial. Esta gente ha demostrado que el dinero tiene la capacidad de corromper a cualquier funcionario. Si viviéramos en un Estado de Derecho, si se violenta la instrucción de un juez, las personas que lo violen se van a la cárcel”, añadió.

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La también integrante del Comité Estatal de Protección a la Tortuga Marina expuso que los ambientalistas son un grupo pacifista que no ejercerá acciones violentas para hacer cumplir la Ley, pero seguirán ejerciendo presión ante las instancias nacionales o, de ser necesario, ante las internacionales.