Máximo histórico de colocación de deuda

Inversionistas japoneses reiteran su confianza en la economía de México.

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MÁXIMO HISTÓRICO DE LA COLOCACIÓN DE DEUDA MEXICANA EN EL MERCADO JAPONÉS. El Gobierno federal concluyó una emisión de deuda en yenes por 165 mil millones de yenes (mil 500 millones de dólares), informó el jueves pasado la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

 

La colocación se hizo a través de cuatro bonos con vencimientos en 2022, 2024, 2026 y 2029 y rendimientos a los inversionistas de 0.62, 0.83, 1.05 y 1.3%, respectivamente.

 

"Tanto el monto colocado como la demanda alcanzada en esta transacción significan máximos históricos para una emisión de deuda realizada por el Gobierno federal en el mercado japonés. Lo anterior, reitera la confianza de los inversionistas japoneses en las finanzas públicas del país", subrayó.

 

La operación contó con la participación de 107 inversionistas de distintos sectores del mercado japonés y otro países, con lo que se alcanzó una demanda total de 225 mil millones de yenes.

 

La dependencia explicó que con esta emisión de deuda y las colocaciones realizadas el 16 de enero, por un monto de dos mil millones de dólares, y el 1 de abril, por una cifra de mil 500 millones de euros, la administración federal concluyó su programa de financiamiento externo de mercado correspondiente a este año.

 

La Secretaría resaltó que la transacción está dentro de los límites de endeudamiento externo dictados por el Paquete Económico 2019 y en línea con la estrategia del Gobierno federal sobre el tema.

 

Por otra parte, la dependencia encabezada por Carlos Urzúa, informó sobre una operación de manejo de pasivos en el mercado mexicano para mejorar el perfil de vencimientos de deuda. Con la transacción se buscó "suavizar" el perfil de vencimientos de deuda del Gobierno federal en moneda local sin incurrir en endeudamiento adicional, explicó Hacienda, así como "mejorar la liquidez del mercado de deuda local" para ofrecer a los inversionistas más opciones para el rebalanceo de sus portafolios.

 

COPARMEX OPINA QUE LAS CARENCIAS DEL PLAN NACIONAL DE DESARROLLO IMPIDEN QUE SIRVA COMO HOJA DE RUTA. El sector patronal del país rechazó la semana pasada el Plan Nacional de Desarrollo (PND), tal como lo aprobaron los diputados del grupo parlamentario de Morena, por contener carencias que lo imposibilitan a ser hoja de ruta de las políticas que requiere el país para los próximos años.

 

“Diputados del grupo parlamentario de Morena y sus aliados, aprobaron como un mero trámite el Plan Nacional de Desarrollo 2019 – 2024, un documento confuso, sin metas, con estrategias poco contundentes y descalificaciones hacia el pasado. Desde Coparmex rechazamos el PND tal cual está hoy redactado, pues no incluye una visión ambiciosa, bien planeada y realista para nuestro país”, señaló Gustavo De Hoyos Walther, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

 

Ante las visibles carencias del PND, resulta prioritario que los programas sectoriales cubran estas deficiencias con metas y estrategias claras, que deberían complementarse con algunas propuestas que hace la Coparmex de programas sectoriales, de acuerdo con De Hoyos Walther.

 

Para la Coparmex, el PND aprobado no es un plan pues no tiene acciones concretas, ni mecanismos de evaluación y las dos partes que lo componen (el documento político y el anexo que es más técnico) se contraponen en las pocas metas fijadas.

 

“Aun cuando en su anexo, elaborado por la SHCP, se ponen ciertas métricas, estas entran en contradicción con la primera parte y tienen errores de cálculo”. Además, Coparmex advierte que, sin estrategias específicas para promover el empleo y las inversiones, el PND contempla una meta sexenal de crecimiento promedio de 4% que no es alcanzable.

 

“Al paso que vamos, y con los recortes recientes a las expectativas de crecimiento para 2019 y 2020 de los analistas consultados por Banxico, nuestro país tendría que crecer a tasas superiores a 5.2% anual de 2021 a 2024. Algo poco factible”, precisa el organismo.

 

Otras de las contradicciones es la meta de reducción de los índices delictivos ya que en el documento político se especifica que para 2024 se habrán reducido en 50% respecto a 2018 y en el anexo técnico se habla de una reducción tan sólo del 15%.

 

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