Stephani Blanco/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La herencia de un sobreendeudamiento de las últimas tres administraciones: Roberto Borge Angulo, Félix González Canto, y Joaquín Hendricks Díaz, llevaron a que Quintana Roo tenga el primer lugar a nivel nacional con la mayor deuda per cápita, esto de acuerdo con la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

Un ciudadano del estado hasta el tercer trimestre de 2017 adeudaba 10 mil 470 pesos, casi tres veces más del promedio nacional que es de tres mil 545 pesos, detalla el reporte de “Mi deuda sin sentido”, realizado por la Coparmex.

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En el reporte detalla que además de ser el estado con la deuda por habitante más alta tiene un endeudamiento elevado que llevó a que la nueva administración realizara una renegociación de las tasas de interés, ya que Borge Angulo dejó un adeudo de 22 mil 247 millones de pesos cuando al inicio de su gestión era de 13 mil 25 millones de pesos.

La entidad se ubica entre las cinco con las deudas per cápita mayores a cinco mil pesos junto con Nuevo León con nueve mil 946 pesos; Chihuahua con nueve mil 866; Coahuila con nueve mil 480, y Sonora con siete mil 223 pesos.

El endeudamiento es un problema de presión para el gobierno estatal y esto limita o da poco margen de maniobra para llevar a cabo acciones, además de que esto lleva a una demanda de mayores servicios e infraestructura que no pueden ser respondida a tiempo, explicó Luis García Silva, delegado de Economía de Quintana Roo.

Durante la administración de Hendricks Díaz, la deuda era de 748 millones de pesos y per cápita alcanzaba apenas 855 pesos; pero cuando llegó González Canto en 2005 alcanzó los mil 927 millones de pesos aunque para 2010 la deuda per cápita llegó a los siete mil 571 pesos.

Para 2012 ya en el mandato de Borge Angulo la deuda pública era de 13 mil 25 millones de pesos aunque en 2016, antes de que terminara su gestión, alcanzó los 22 mil 247 millones de pesos.

Para García Silva hay un factor positivo para enfrentar esta situación: Las finanzas públicas no han puesto en riesgo a las inversiones hacia el destino, lo que mantiene a la entidad con un crecimiento en promedio de 4% anual.