Con los expedientes en mano de los 14 aspirantes al sillón de Presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Quintana Roo, nuestros diputados iniciaron ayer en forma exprés las entrevistas públicas individuales para elegir al sucesor de Harley Sosa Guillén. La convocatoria lanzada por el Congreso local atizó el entusiasmo de 17 pretendientes, pero tres quedaron tendidos en el tablero al no subsanar a tiempo las observaciones. 

Los candidatos son Claudette Yanell González Arellano, Olga Tatiana González Morga, Martha Gabriela Rojo Castillo, Sabina Rosa María Márquez Pérez y María José López Canto, Miguel Tlapa García, Leopoldo Cruz Navarro, Patricio Cervantes Romero, Marco Antonio Toh Euán, Manuel Antonio Angulo Morales, Adrián Francisco García Rejón, Eduardo Ovando Rivera, Roberto José Julio Guzmán Rodríguez y Enrique Miguel Paniagua Lara. 

Algunos de los candidatos son funcionarios de la Cdheqroo, como es el caso de Eduardo Ovando Rivera, Marco Antonio Toh y María José López Canto, lo que podría ser un punto a su favor. Y como el tiempo apremia porque el período del actual Ombudsman concluye formalmente el 24 de enero, el Congreso programó de inmediato el arranque de las entrevistas que deberán concluir este viernes para dar paso a la decisión final. 

Los hombres han dominado en esta posición ocupada tan sólo por una mujer: Celia Pérez Gordillo; el acentuado desequilibrio podría despejar ahora el sendero a una mujer, y aquí hay dos perfiles revisados a conciencia donde se toman las decisiones: Olga Tatiana González Morga y Claudette Yanell González Arellano. 

Si el criterio es otro, el caballo negro es el perredista Patricio Cervantes Romero, quien conoce todos los laberintos de la Comisión ubicada en una zona curiosamente estratégica, al ser vecina de la Fiscalía General del Estado y de la clínica del IMSS. Otro alfil de la Comisión es Eduardo Ovando Rivera, hijo del ex senador chetumaleño que voló del nido priista: Eduardo Ovando Martínez.

Los diputados encargados del proceso tienen los reflectores concentrados en su mesa de operaciones y tendrán que revisar cada perfil a conciencia, ya que la posición es complicada por su naturaleza. Pero sabemos que el ingrediente político define el proceso que ha motivado una significativa participación de profesionales quintanarroenses, ya que este tipo de vacantes no aparece con frecuencia en la sección de anuncios clasificados del periódico del pueblo.