IEQROO descarta agresiones y violencia contra candidatos en Carrillo Puerto
Se hizo un llamado a los ciudadanos para que participen en un proceso electoral tranquilo, amigable y democrático.
El Consejo Distrital 13 de Ieqroo en Felipe Carrillo Puerto descartó que pese a los ataques y “guerras sucias” que se ven en las redes sociales entre distintos candidatos y partidos políticos, no ha habido quejas ante el órgano.
Joselín Morales González consejera presidenta del 13, expuso que es evidente que en cada proceso se comience a registrar este tipo de euforia, la pasión de quienes están inmiscuidos en el tema político y en este proceso no es la ocasión, sin embargo, ningún candidato ha manifestado estar en riesgo.
Destacó que el proceso actual se ha desarrollado de manera tranquila y no se anticipa un aumento significativo de incidentes. Sin embargo, reconoció que es probable que la pasión política aumente una vez que el proceso se inicie oficialmente el 15 de abril y puede que exista.
Asimismo, enfatizó que cualquier candidato que se sienta amenazado o sujeto a agresión física debe notificarlo de inmediato para recibir la protección necesaria, pero no sólo ellos, también ciudadanos quienes sientan que se les está violentando sus derechos político electorales, pueden manifestarlo.
Destacó que los protocolos y lineamientos del Instituto Electoral de Quintana Roo (IEQROO) para la prevención y atención de la violencia política, tanto de género como en general. Establecen los procedimientos para denunciar casos de violencia política y las medidas que pueden tomar las autoridades electorales para garantizar un proceso electoral libre de violencia.
“La violencia política en México está sujeta a diversas disposiciones legales, tanto a nivel federal como estatal, que establecen sanciones para quienes la perpetren. Sin embargo, es importante destacar la necesidad de fortalecer la aplicación efectiva de estas leyes y garantizar la protección de los derechos políticos de todas las personas”.
Hizo un llamado a los ciudadanos para que participen en un proceso electoral tranquilo, amigable y democrático y que cualquier disputa se resuelva a través del voto en las urnas, sin la necesidad de tener que llegar hasta los extremos como ha ocurrido en otras partes del país.