En Quintana Roo, más de dos mil 600 hectáreas de vegetación han sido afectadas por los incendios forestales, que se han disparado durante el mes de abril y que mantienen actualmente a más de 200 brigadistas luchando contra las llamas en municipios del centro y sur.

El reporte del Centro Estatal de Manejo del Fuego reporta que del 1 de enero al 20 de abril se liquidaron un total 17 siniestros que terminaron por consumir mil 55 hectáreas de vegetación. 12 de estos incendios ocurrieron en el centro y sur de Quintana Roo. Ahí también se concentraron las mayores afectaciones con más de 900 hectáreas, solo en esa región.

El año pasado, en estas mismas fechas, la cantidad de incendios era de 16, un número similar, aunque en 2023, el número de hectáreas afectadas fue era menor, únicamente 532.

Actualmente, hasta el 20 de abril, seguían activos cinco siniestros con más de mil 600 hectáreas consumidas, todas ubicadas en el centro y sur del estado. Tres de ellos, son de grandes dimensiones.

El primero es denominado El Limonar y se ubica en el municipio de José María Morelos. El incendio fue detectado desde el pasado 5 de abril.

En su combate trabajan actualmente 48 elementos de la Comisión Nacional Forestal, así como de la Brigada de Protección Forestal del municipio. La afectación ha alcanzado las 650 hectáreas, con un control del 70%.

El segundo se encuentra en el municipio de Bacalar y denominado El Zorro. Ahí luchan 35 brigadistas, incluyendo voluntarios. La afectación era de 600 hectáreas y un control de 50%.

El tercero es El Cafetal, también en el municipio de Bacalar. Ahí es donde mayor personal de combate trabaja: 102 combatientes, más de la mitad voluntarios. Entre ellos también hay elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, incluso, brigadistas del municipio de Felipe Carrillo Puerto. El control es de un 40%. La afectación hasta este fin de semana era de 350 hectáreas.

El incendio La Montaña es el cuarto de la lista y se encuentra cerca de Laguna OM, en Othón P. Blanco. La afectación es de 20 hectáreas, aunque hasta ayer ya tenía un control del 100 por ciento, al igual que la liquidación.

El último siniestro es El Padre, en José María Morelos, con una superficie de 10 hectáreas. Su control es del 70%.