La Secretaría de Medio Ambiente Sustentable y Cambio Climático inició el monitoreo de las costas ante un fuerte arribo de sargazo que se prevé recale este 2025 y supere lo registrado en años pasados.

Samanta Álvarez, secretaria de Medio Ambiente Sustentable y Cambio Climático de Solidaridad, dijo que buscan crear una coordinación fuerte entre la federación y el Gobierno del Estado para hacer frente a este fenómeno.

“Ya lo estamos monitoreando. Estamos trabajando de la mano con el gobierno del Estado y también con la Marina para ver cómo vamos a hacerle para que no llegue tanto. Es un tema que tiene que ver con el cambio climático y obviamente tenemos a mucha gente que está en Zofemat con la limpieza”, dijo Samanta Álvarez.

Reportes especializados muestran que este año el recale de sargazo será considerable con relación a los años anteriores cuando bajó la cantidad. Desde el 2023 la tendencia de recale de sargazo es a la baja.

No obstante, una toma satelital de las autoridades estadounidenses muestran que la presencia del sargazo se ha incrementado en la parte central del Mar Caribe, lo que podría traer un fuerte recale en las próximas semanas.

Inician monitoreo de sargazo; prevén alto arribo en este 2025 / (Foto: SIPSE)

“Estamos trabajando en eso porque tenemos idea de que va a llegar el sargazo, obviamente nunca esperamos que sea menor al año pasado, esperamos que sea más y como lo hemos estado monitoreando parece ser que así será”, abundó.

Para este año se prevé nuevamente la colocación de la red contra el sargazo que se ubica frente al tramo costero del primer cuadro de la ciudad.

Por el momento, la autoridad local no ha dado a conocer el monto económico que ejercerán para hacer frente a esta problemática; sin embargo, esperan con estos recursos la contratación de personal para la limpieza de la costa.

El tema del sargazo en años anteriores ha ocasionado una problemática del tipo ambiental que ha amenazado a las especies marinas de Playa del Carmen.

Además de que ha creado un problema con el turismo que se ve ahuyentado por el mal olor que despide la materia cuando comienza a pudrirse.