Ante la crisis, cañeros de Quintana Roo crean su propio fertilizante
El fertilizante de fórmula aumentó este año de 450 a 900 pesos el bulto de 50 kilos.
Ante el aumento de más del 100% del precio de los fertilizantes minerales, productores de caña de la ribera del río Hondo instalaron una biofábrica, donde producen sus propios fertilizantes orgánicos.
El presidente de la Unión Local de Productores de Caña de Azúcar (ULPCA), Evaristo Gómez Díaz, aseguró que buscan contrarrestar el aumento en los gastos de cosecha, ya que, el fertilizante de fórmula aumentó este año de 450 a 900 pesos el bulto de 50 kilos.
“Los químicos y fertilizantes se fueron al doble, y es un tema que le pega directamente a la economía de los productores de caña, es por eso que instalamos una biofábrica y estamos capacitando a los productores para que preparen sus propios fertilizantes orgánicos a un precio bajo”, comentó.
Detalló que estos productos ya están probándose en las parcelas, aplicándolos por medio de drones y dando buenos resultados, debido a que contrataron a un especialista en nutrición de plantas de caña de azúcar, quien les está enseñando a preparar estos fertilizantes orgánicos.
“Buscamos opciones para que los productores tengamos mayor rendimiento en el campo a menor costo; que la producción sea más barata y ahorrarnos millones de pesos en fertilizantes”, explicó Gómez Díaz.
Además, explicó que esto contribuiría a traer menos contaminación tanto a los suelos como a al medio ambiente.
Con estos insumos orgánicos se busca mantener la producción de un millón 900 mil toneladas de caña al año y crecer más con productos orgánicos, así como reducir el fertilizante de fórmula de forma paulatina hasta lograr un paquete tecnológico 100% orgánico en las 35 mil hectáreas de la zona.
Al respecto el especialista en nutrición de plantas, David Millán, quien capacitó a los productores, explicó que para hacer fertilizantes poliquelatado mejorado para caña de azúcar, fueron a la alta montaña y recolectaron microorganismos, los cuales mezclaron con melaza y salvado de trigo para después realizar un fertilizante especial compuesto tipo foliar.
Debido a que la calidad de un abono orgánico se determina a partir de su contenido nutricional y su capacidad de proveer nutrientes a un cultivo como la caña de azúcar, éste cumple con los estándares.
Entre los abonos orgánicos de uso más común se encuentran compostas, vermicompostas y bocashi, los cuales pueden obtenerse a partir de diversos ingredientes y los costos son de hasta 80% menores que los fertilizantes minerales.
Sin embargo, a pesar de su mejor rendimiento del fertilizante orgánico, los de minerales son los más demandados en sistemas intensivos de producción como la caña de azúcar. En la ribera del río Hondo se estima que se aplican al menos 15 millones de toneladas de fertilizantes.