Investiga el IFE 81 casos de credenciales con anomalías

Los comprobantes de domicilio se repiten, según la vocal del Registro Federal de Electores, de la Junta Distrital 03. El organismo recaba huellas y firmas.

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El IFE busca que las credenciales de elector sean confiables y seguras. (Tomás Álvarez/SIPSE)
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Claudia Olavarría/SIPSE
CANCÚN, Q.Roo.- El Instituto Federal Electoral (IFE) investiga 81 casos de solicitantes de la credencial oficial de elector porque los comprobantes de domicilio se repiten, informó Abigail Zapata Carvajal, vocal del Registro Federal de Electores, de la Junta Distrital 03 en Benito Juárez.

Como parte del convenio de colaboración entre el IFE y el Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo), el primero entregó una lista nominal al segundo para que se realicen las elecciones locales correspondientes, y como parte de ello hay una depuración especial durante el mes de abril, en el que se hace una visita domiciliaria y verificación de domicilios, presuntamente irregulares o falsos detectados durante el período de actualización del padrón.    

Zapata Carvajal indicó: “En la primera remesa que llegó tenemos 81 documentos que deben verificarse en campo para determinar su situación registral y una vez realizado se aplica un procedimiento jurídico para la exclusión de padrón y la lista nominal que corresponde en caso que se corrobore la anomalía o declaración de falsedad de datos”.

La detección se hace a través de movimiento de tipo atípico en oficinas centrales, en las que se hace la captura matemática y estadística y es la forma en la que se detectan ciertas situaciones.

Dentro de los programas permanentes de depuración detectan movimientos hacia determinadas secciones de determinado distrito o determinado domicilio que dan pie a la investigación.

La funcionaria aseguró que cuentan con un programa de detección de domicilios presuntamente irregulares o falsos o con alto número de empadronados. El IFE tiene toda la cartografía y se sabe cuál es particular y no puede tener más allá de cierto número de electores residentes, y cuando se pasa de ese promedio se manda a campo y se revisa si viven en dicha vivienda, y si no lo hacen, procede una denuncia ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).  

Durante la investigación se recaban huellas y firmas y si estas no coinciden se procede jurídicamente. La persona podrá no tener la misma fisonomía, pero las huellas dactilares son únicas y ahora se toman de los 10 dedos de las manos para evitar errores y confusiones.

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