“La huesuda ya viene por mí”; tenía síndrome de abstinencia

Un sujeto provocó la movilización de una ambulancia debido a sus delirios por falta de alcohol.

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El síndrome de abstinencia le hizo pensar a Hugo que ya había llegado al fin de sus días; no requirió hospitalización. (Redacción/SIPSE)
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Redacción/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.-  Tras no soportar los estragos de la sobriedad, un alcohólico en recuperación sufrió un ataque de ansiedad ayer a las cinco de la mañana en la colonia Colosio, motivo por el cual los vecinos tuvieron que llamar a una ambulancia.

Fue en la calle 42 entre 40 y 45 de la colonia Colosio donde a un sujeto identificado como Hugo “N”, de 40 años, originario de Tabasco, le dio un ataque de ansiedad derivado de la falta del alcohol, al punto de sentir que se moría.  Trascendió que el sujeto intentaba mantenerse sobrio.

Había llegado a su hogar en la citada dirección, pero en la casa marcada con el número 125 le dio el primer ataque; vecinos de la cuartería despertaron al notar la desesperación y los gritos, por lo que solicitaron la presencia de paramédicos de Trauma, quienes no tardaron en llegar a la escena.

Creyó que había llegado su fin

Con horror, el sujeto gritaba “la huesuda ya viene por mí, ayúdenme”, y pedía un calmante de amargo sabor que le quitara la ansiedad; su acomedida vecina le invitó el trago de una botella que tenía guardada para calmar su desesperación.

Un paramédico lo valoró para corroborar que no tuviera algún padecimiento que pusiera su vida en riesgo; al confirmar que se trataba de un ataque de ansiedad por falta de alcohol recomendó al paciente acudir a una clínica de rehabilitación.

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