Con los ayuntamientos más importantes de Quintana Roo (hablando en materia turística) en manos de Morena, y siendo el gobierno federal del mismo partido político, uno esperaría que a estos municipios no les falte nada, pero no es así, sino todo lo contrario. 
 Lamentablemente, Puerto Morelos llegó a sus seis años de vida, con una celebración empañada de sangre, pues a dos días de celebrar su aniversario, el sábado 6 de noviembre, un enfrentamiento entre narcomenudistas en el hotel Hyatt Ziva dejó como saldo un escándalo internacional. 
 Y poco antes, en Tulum, una escena similar se vivió en el restaurante “La Malquerida; ambos municipios son gobernados por Morena, más específicamente, por ciudadanos que fueron abanderados de la coalición Morena-PVEM-PT-Movimiento Auténtico Social. 
 También, el común denominador de estas dos demarcaciones es que carecen de auténticas policías para prevenir el delito, que es la única función que cumplen sus corporaciones policíacas.  
 Pero tampoco se les puede exigir mucho, cuando la Federación les desaparece el Fortaseg y los deja a su suerte para enfrentarse a criminales con sendas armas largas como las usadas en la Bahía Petempich. 
 Esta triste historia nos es privativa de Quintana Roo.
El 14 de julio, el presidente López Obrador se reunió con los gobernadores de Morena para pedirles que reduzcan la violencia en 50 municipios más inseguros del país, pero nunca les ofreció más presupuesto específico para este rubro. 
 Los mandatarios morenistas, como tampoco se pueden poner de exigentes, pidieron que, por lo menos, se abra un verdadero canal de comunicación y coordinación con las fuerzas federales, o que se refuerce la presencia de las mismas en los lugares más conflictivos. 
 Eso fue en julio. Para el caso de Tulum, Quintana Roo los refuerzos llegaron tres meses después, y sólo porque de plano tuvieron que morir otras dos turistas, por estar en el fuego cruzado de vendedores de droga.  
 Las autoridades del estado minimizan los hechos diciendo que estos hechos lamentables son resultado de una disputa entre vendedores de droga; y sí, los estupefacientes se venden en todos lados, pero
¿En qué otro lugar del mundo se enfrentan así, abiertamente, sabiéndose intocables?