Laguna de los Siete Colores requiere con urgencia mantenimiento

Las condiciones actuales de la laguna es que las aguas de la orilla han formado rocas de sarro, conocidas como estromatolitos.

|
Laguna de los Siete Colores requiere con urgencia mantenimiento; señalan
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Las zonas poco profundas dentro de la laguna de Bacalar, específicamente a orillas de la franja que comprende la ciudad que es de aproximadamente ocho kilómetros, requieren con urgencia mantenimiento.

María Luisa Villarreal Sonora, conocida investigadora del ecosistema lagunar, dijo que además de ello, la formación de rocas de sarro que se conocen como estromatolitos, están obstruyendo los flujos de salida de la laguna y ocasiona una especie de rebosamiento de una piscina, porque no tiene cauce el agua que le entra.

Aseguró que muestra de las condiciones actuales de la laguna es que las aguas de la orilla se observan más obscuras que hacia adentro, a excepción del balneario ejidal “Mundo Mágico”, donde existe la única zona de nado que recibe manejo y se usa, porque los ejidatarios se han preocupado en brindarle mantenimiento por su cuenta, “eso es muestra de que los habitantes locales saben cómo oxigenar y cuidar su laguna”, subrayó.

Indicó que existe la falsa idea de que la laguna no se debe tocar y los propietarios y prestadores de servicios asentados a las orillas, no lo hacen, por lo que se está deteriorando ante la falta de oxigenación.

Consideró que existe necesidad de extraer ese sedimento asentado en el fondo, retirar la maleza, principalmente el lirio acuático y oxigenar la zona.

Para ello, han sostenido reuniones con autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para exponerles la necesidad de generar un programa de mantenimiento de la laguna, para conservarla en buenas condiciones.

Comparó la laguna de Bacalar con una alberca gigante que requiere mantenimiento y oxigenación para conservar en buenas condiciones el agua, en virtud de que no tiene oleaje y  “la única forma de oxigenarla es moviéndose, mientras menos se mueve, más se echa a perder”, ejemplificó la especialista.

María Luisa Villarreal Sonora, es una estudiosa de la laguna desde hace varios años, brinda asesoría a ejidatarios de Bacalar para la conservación y explotación sustentable de sus recursos, es autora del libro “En Defensa de la Laguna de Bacalar”, donde habla de la complicidad de una tríada para despojar a los dueños de sus tierras a orillas del cuerpo lagunar, mediante la teoría de que los estromatolitos son rocas vivientes, pero de acuerdo con ella, son acumulaciones de cianobacterias que conforman rocas que están afectando la laguna.

Prestadores de servicios turísticos coinciden en que la laguna requiere mantenimiento y se debe implementar un proceso dictado por la Semarnat que involucre a propietarios y prestadores de servicios para que coadyuven en la conservación de su ecosistema, lejos de la falsa idea de que la laguna no se debe tocar, dijeron.

(Con información de Javier Ortíz)

Lo más leído

skeleton





skeleton