Mantener la unidad será el reto de ahora en delante de los morenistas, luego de que la cúpula guinda diera a conocer los nombres de los que serán sus candidatos a gobernador o gobernadora en los estados de Quintana Roo, Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca y Tamaulipas. 

El reto se antoja interesante, puesto que desde que la lista fue difundida de forma oficial, se registraron dos manifestaciones de rechazo en diferentes entidades: Quintana Roo y Tamaulipas.  

En el estado quintanarroense, la senadora Marybel Villegas Canché aseguró en sus redes sociales que la designación de Mara Lezama como candidata a gobernadora se trató de una imposición y que la decisión la tomó la cúpula de Morena, y no los ciudadanos. 

Además, dejó entrever que de nueva cuenta daría el salto hacia otro partido para buscar su soñada candidatura; aunque la advertencia de irse a otro partido en caso de que “las encuestas” no le favorezcan, la hizo desde tiempo atrás, cuando seguramente se enteró que el índice no apuntaría hacia ella. 

Cosa similar se replicó en Tamaulipas, donde Alejandro Rojas, senador de Morena, se manifestó en contra de la decisión de nombrar a Américo Villareal Anaya como candidato a gobernador de ese estado. 

Rojas fue más allá, y deslizó en sus redes sociales que los resultados de esas encuestas “no las cree ni Santa Claus”. El senador también advirtió que Morena debería de tener cuidado de imponer a candidatos que no cuentan con legitimidad ni autoridad moral, pues se podría repetir escenarios como los de Nuevo León y San Luís Potosí, donde el partido guinda perdió las gubernaturas. 

Pero estas dos manifestaciones en contra de los candidatos de Morena a las gubernaturas, las realizadas por Marybel Villegas y Alejandro Rojas, distan mucho entre sí, pues por el lado de Quintana Roo, la senadora amenaza con romper relación con el partido guinda y buscar la candidatura en otro instituto político y, por el otro, en Tamaulipas el senador le apuesta a la unidad, y asegura que sólo espera el llamado para sumarse al ungido. 

La civilidad política nunca ha sido el fuerte de Villegas Canché, pues en ella ha prevalecido siempre la búsqueda de espacios y cargos a como dé lugar, sin importar el color, las siglas o los estatutos partidistas que tenga que hacer a un lado. 

Y es quizá esa cualidad tan “perseverante” de la senadora por el poder, lo que le ha cerrado las posibilidades de acceder a sus dos más recientes aspiraciones políticas: la candidatura a presidenta municipal de Benito Juárez y, ahora, a la gubernatura de Quintana Roo. 

El presidente Andrés Manuel López Obrador sabe muy bien de lo que hacen o dejan de hacer la militancia, en especial cuando se trata de morenista que se dicen de hueso colorado y que ocupan cargos relevantes en la esfera pública y política de nuestro país. 

¿Logrará Morena llegar en unidad hasta el 18 de febrero, que es cuando se deben registrar los candidatos a gobernador definitivos?