CHETUMAL.- Los directores y maestros no deben dejar solo a ningún niño fuera de las escuelas, hasta que sus padres lleguen por ellos. Además, necesitan tener un control sobre el historial de los vendedores ambulantes de los alrededores.

Es el pronunciamiento del diputado Eduardo Martínez Arcila, presidente de la Comisión Legislativa de Educación, quien añadió que también es necesario que los padres de familia se coordinen entre ellos para garantizar la seguridad de sus hijos, a fin de evitar casos como el de la pequeña Fátima, quien hace unos días fue sustraída de su escuela en la Ciudad de México ante la tardía llegada de sus padres.

"Tenemos que entender que los niños y niñas son un grupo vulnerable ante la delincuencia. Por tanto, las autoridades educativas deben considerar medidas más efectivas para garantizar su seguridad; y esto incluye formar con los padres y madres grupos de vigilancia".

Sobre este último punto, explicó que además de los maestros y directores, se pueden organizar grupos de 10 o 15 padres de familia para que apoyen en el cuidado de los alumnos en caso de que a algún padre presente algún retraso.

Es algo posible, dijo, si se toma en cuenta que en una escuela primaria o secundaria estudian 300 a 500 alumnos, por lo que es muy probable que existan padres dispuestos a participar en un programa de este tipo.

En el mismo sentido, Martínez Arcila exhortó a los diferentes administraciones municipales a apoyar con elementos policiacos en las escuelas que se encuentran en “puntos conflictivos”.

“Cada Gobierno local conoce muy bien su demarcación, y si bien por las limitaciones de las corporaciones policiacas actuales es casi imposible poner un policía en cada escuela, si pueden establecer puntos de vigilancia en las escuelas ubicadas en colonias conflictivas, al menos a la hora de la salida”, dijo.

Por último, hizo un llamado a los directores de las primarias para evitar “dejar afuera” a los niños y niñas que llegan tarde, si no están presentes sus padres.