Gracias Taipei
Nos gusta comer de los frutos, pero no hacer crecer el árbol...
Muchas frases aglutinan mi mente pero la que más queda en esta ocasión es: Nadie es profeta en su tierra. Victoria Rueda por tercera vez da un revés a la comunidad artística de nuestro Cancún demostrando que sin ayuda de autoridades, iniciativa privada ni de mecenas escondidos, se puede y mucho. Lo más difícil para un artista es convertirse en empresario sin dejar de ser artista y eso es prácticamente imposible. Decía mi madre que el artista si quiere triunfar de verdad deberá dejar su destino a un repretransante, porque te representa aunque de repente te tranza. Que el artista haga lo que sabe y con eso se llegará a buen puerto siempre y cuando domine el arte de la venta, las relaciones públicas, la política, la vida social; y que difícil cuando nos choca socializar entre políticos y gente que no es artista, vender, cobrar, ir a medios de comunicación, entrevistas y demás. Nos gusta comer de los frutos, pero no nos gusta hacer crecer el árbol que los dará y se hace simplemente haciendo lo anterior y no hay de otra. Art Revolution Taipei 2017, 2018 y ahora 2019 fueron un éxito rotundo en la carrera de esta gran artista. Vender toda la obra expuesta en 90 minutos fue algo excepcional que nunca se había dado en esta feria. Obvio su presencia en el Art Revolution Taipei 2020 está garantizada para seguir enamorando con su obra al mercado asiático. Mucho por hacer, mucho por corregir, mucho por pintar y muchos horizontes a donde ver para seguir expandiendo en todo el orbe para ser considerada una de las mejores artistas plásticas del mundo y también de México. Mujer que sin descuidar su esencia de artista ha sacado adelante a tres hijos, ha puesto la mejor academia de arte en nuestra ciudad con un rotundo éxito y todo ello por nunca hacer las cosas a medias y siempre hacerlas bien a pesar de las adversidades y de los enemigos que no son pocos y más cuando nos está yendo bien. Deseándole mucho éxito (porque se lo merece), que siga siendo bella por dentro y por fuera y que tenga más mercados en el orbe y siga teniendo una férrea disciplina artística y financiera para que en dos años haya llegado a la cumbre y esté en aras de festejar ahora sí en grande. Muchas felicidades y bien sabes que se te admira y quiere con “h” de harto. Hasta la próxima semana.